5 estrategias para que vuelva a enamorarse de mí

Capítulo 167

“Sosteniendo mi mano tan fuerte, ¿es que quieres‘ a tu pequeñita?“, dijo con una sonrisa traviesa.

Bajo la baranda de la cama hospitalariae, imponiendo su fuerza, levantó a Soraya sobre la cama.

“Viendo tu desesperación, supongo que tendré que sacrificarme y ayudarte. Si no, no hans más que pensar en cómo estoy sobre timpidiándome concentramenet trabajo.”

Soraya se sintió incómoda de inmediato.

So su mano rápidamente, “Amos ¿qué estás haciendo?”

Maldición, collo porque mi mano está herida y cree que no puede hacerma nada, me atrevo a hablar aai. Si realmente pasa una semana, mi pobre cintura no lo soportaria

Cristian, escuchando sus pensamientos internos, casi suelta una carcajada.

Je, persó que ella era valiente, però resulta que tiene el corazón de un ratón,

Le susuno al oido. ¿No fuste tu quien dijo que querias que cuide a tu pequefita?”

¡Boom!

Soraya, que siempre se jaco do tener la cara dura, inesperadamente se sonrjó

Rid perviosamente, “Jaja, amoy solo estaba hablando por habla era una broma.”

Ay Dios mio! Siempre he sido yo quien lo provoca Ahora que me provoca él, siento ganas de huir. Y lo peor es que esos ojos profundos de Cristlin son como un vortice. casi me arrastran hacia adentro. Que peligro

Intenta moverse hacia el borde de la cama para escapar.

Cristian, conteniendo su risa, la aprison com um brazo.

“Siempre eres tú quien me provoca, ahora es mi tumo de darte una probadita.”

se inclino para

un poco de provocación no

que Soraya se

evitar gemir

encantador la sorprendió a

he sido la que ruge como un edn. Maldita sea, ese geido fue demasiado

ella,

torente de electricidad recomió el cuerpo

demasiado malo, cómo se

tiño de rojo, intentando

con la mano herida, envuelta como un tamal, no

“Amo…

de Cristian se oscurecon mắt.

resond en su oido

“¿Para qué?”

su

su mirada en Soraya, no se perdón una sola expresión

deberia hacer como

provocar, lungo conquistar el

encontraba

corazón de esta mujer podria ser más emocionante que cer un contrato millonario.

el deseo de conquista, cuanto más inalcanzable,

después de entrar en la novela

Mademia, que muerte!

hombre sabe

mis provocaciones

shora…

esposo no solo son bonitas,