Capítulo 323

Aunque lan estaba muy ocupado, decidió quedarse en Bogotá para acompañar a Clara.

El secretario Gonzalo, a través de sus contactos, consiguió una pequeña oficina.

Aunque era pequeña, tenia todo lo necesario.

lan solia trabajar alli, con sus guardaespaldas afuera, mientras que el secretario Gonzalo iba y venia de un lugar a otro

Al día siguiente, Flynn regresó de Inglaterra!

Estaba agotado y lleno de culpa

En la puerta de la sala de la UCI, lan tuvo una pelea con él. Aunque Flynn no se defendió, su mano estaba ligeramente hinchada.

El secretario Gonzalo le aplicaba pomada mientras hacía bromas.

“Ya estás viejo, deberías cambiar tu temperamento!”

El enfado que lan habia estado reprimiendo volvió a surgir. “¡Creo que no fue suficiente! ¡Este bastardo, lo voy a

matar

Mientras hablaban, hubo una conmoción en la puerta.

El secretario Gonzalo fue a ver qué pasaba y poco después trajo a una persona, era Silvia.

El secretario Gonzalo, sabiendo lo que era conveniente, salió de la habitación.

Silvia avanzó unos pasos, pero no se atrevió a acercarse más.

lan sacó un cigarrillo con una mano, lo encendió y después de dar una calada preguntó en voz baja, “¿Por qué viniste aqui?”

Ella levantó la pomada en su mano, “¡Vine a aplicarte la pomada!”

En realidad, lan ya se había aplicado la pomada, pero no le importó hacerlo de nuevo.

En el sofá estrecho, ella se sentó a su lado, sosteniendo su mano mientras le aplicaba cuidadosamente la pomada lan fumaba lentamente su cigarrillo, observándola.

Tenia una cara pequeña y pálida, con pestañas larguísimas debajo de sus ojos.

lan preguntó como si no fuera nada importante, “Ese chico era bueno, ¿por qué no están juntos?”

Ella se quedó atónita por un momento antes de darse cuenta de a qué se refería.

Inhaló suavemente, “No me gusta mucho!”

Dicho esto, soltó su mano, su voz sonaba como un gatito, “Ya está!”

Queria irse, pero alguien la agarró.

Fue obligada a sentarse de nuevo a su lado, no sabía si era su imaginación, pero sentia que estaba muy cerca de él tan cerca que podia oler el leve aroma del tabaco en el

La mirada de lan era profunda

Su hermoso dedo acarició suavemente sus labios

Ella temblo, llamándolo impotente, lan

Inclino la cabeza, apoyándola en su frente mientras murmuraba suavemente. Para que has venido? ¿Para redimir los pecados de tu hermano, o porque no puedes contenier tus sentimientos, o porque te gusta un hombre que te lleva mas de diez años, dime. ¿qué esperas obtener de mi?”

Capitulo 323

Su pregunta fue directa, y ella se sintió avergonzada.

Ella temblaba, incapaz de responder, pero lo que lan queria no era su respuesta.

La beso

igual que la última vez, la presiono suavemente contra su pecho, besándola suavemente para que se relajara, luego exploró suavemente, probando su

queriendo resistirse.

agarrada por la cintura, y luego, fue llevada

hacer era abrazar fuertemente su cuello, pero después de un rato, no pudo soportarlo más y se deslizó hacia atrás, abrazandolo por la espalda…

beso, no sabia cómo habia salido de

él la

ella

encontraban en el hospital, pero ella actuaba como si no lo viera, y lan tampoco

miraba su espalda, pensativo.

secretario Gonzalo dijo a propósito, “¡Seguro que la has

recordando aquel beso. La pequeña chica se acurruco en

lo que le causó cierta incomodidad.

mientras trataba con los asuntos de Clara, no podia evitar pensar en lo

entre ellos.

si era posible.

de innumerables imposibilidades, quería ver si podia encontrar una posibilidad.

lan

a Cecilia al

dio dos bofetadas.

lastimaria más, sabía que esa decisión sería muy, muy dificil para

pudo detenerlo Finalmente, fue a buscar a Silvia, suplicandole que lo persuadiera Sr. Molina tiene una reunión importante mañana por la mañana, si sigue bebiendo, perderà la

de mucho rogar, Silvia

Gonzalo abrió la puerta para ella, pero no entró Le dijo

pequeña habitación oscura.

ver claramente a lan apoyado en el sofa, con vanas botellas de vino frente a el Probablemente escuchó los pasos, la miró

“¡Deja de beber!”

acercó y le tomó la mano para impedirle

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Capitulo 323

miró en silencio, sus ojos llenos de venas rojas. Después

Silvia se negó

en la alfombra y recogió todas las botellas

niña jugando a ser mamá, un poco infantil

borracho, sabia que ella no era una niña, no solo eso, sino que ya era una

suavemente y

este dificil periodo, solo se tenian el

voz ronca, dijo “Silvia, vamos a intentarlo“.

influencia del alcohol, se rindió, no pudo resistir la tentación, como cualquier hombre común, deseaba amar a la mujer que le gustaba. En ese momento, incluso pensó que si se acostaban, todo cambiaria y no podria deshacerse.

entendió

la

con pasión en el sofá, sus

llamo a lan

acarició su rostro con ternura,

miraba era completamente la de un hombre mirando a una mujer, una

amor en

tierno y

había bebido y no sabia cómo

tarde, la llevó a la pequeña cama del otro cuarto, la

poco de ruido, crujia.

la mitad de la noche la cama de resortes se sacudió como un pequeño bote

pero no era

necesitaba que ella supiera

escucho el ruido, sabia lo que estaba pasando, así que le pidió al guardaespaldas que se alejara un poco, y

la mañana siguiente, se despertó en

dolia un poco, pero en su mayoría se sentia bien,

vino la voz ronca de

a hacer

además

habia algunas cosas que queria hablar con

antes de que pudiera

suave y temblorosa “Sr. Molina, no se preocupe, lo

Sr. Molina..

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