Diario de una Esposa Traicionada

Capítulo 78

Le di una palmadita en el hombro y cambié de tema con una sonrisa: “Asi que también te gusta lan Castro, nunca lo habías mencionado antes.”

David miró hacia el escenario, con un tono de voz melancólico diciendo: “El amor por ella se extiende a lo que a ella le gusta.”

“¿A ella le gusta?”

“Si, en la universidad le encantaba.”

“Qué coincidencia.”

Sonreí y agregué: “A mi también me empezaron a gustar las canciones de lan Castro en la universidad.”

Él sonrió ligeramente, con un aire de doble sentido mientras asentía: “Sí, es bastante curioso.”

I

Nuestros asientos ofrecían una vista perfecta del espectáculo y no tenía ni un solo ángulo muerto.

Con los primeros acordes familiares, el cantante apareció en el escenario y de inmediato electrificó el ambiente, provocando gritos y coros de innumerables fans. David y yo éramos como dos extranjeros, simplemente escuchando en silencio. Los recuerdos de años pasados se sucedían en mi mente como una pelicula, cambiando de escena constantemente.

Hacía diez años

No te conocía

No eras mío

estábamos juntos.

lado de

calles que poco a

Diez años después

Somos amigos

podemos

Pero esa ternura

no encuentra una razón para

final, inevitablemente se

la canción, de repente las lágrimas empezaron a caer como

un buen rato, cuando iba a buscar un

de David brillaban con un dejo de contención mientras me decía: “Después

“Supongo que no.”

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y al verlo intentando contenerse, no pude evitar decirle: “Si quieres

sonrió con ironía y me preguntó: “¿Quién te dijo que quiero

“¿Entonces qué?”

sorprendida, y lo miré: “¿Todavía quieres seguir tras esa chica?”

admitió abiertamente: “Si.”

que Leticia siempre diga que eres un buen hombre, realmente eres

Solo que, él todavía tenía la oportunidad de seguir adelante con esa chica. Mientras que Isaac y yo, una vez divorciados, probablemente

sonrisa de David se amplió, sus ojos color ámbar brillaban, llenos