Diario de una Esposa Traicionada

Capítulo 203

No hacía falta mirar atrás, solo con escuchar la voz ya sabia que era Andrea. Isaac, sin mostrar ninguna emoción, retiró su brazo y le preguntó: “¿Tú qué haces aquí?”

“Papá me trajo.”

La voz de Andrea era suave: “Papá dijo que en el futuro tendria que ayudarte a manejar los asuntos de la familia Montes, así que penso que sería bueno que empezara a familiarizarme con todo esto.”

Solo sentia ironia en mi interior, cuando escuché a Isaac responder con frialdad: “Entonces ve a buscar a papá, ¿qué haces aqui siguiéndome a mi?”

“¿Qué pasa? ¿Ahora tanto te distancias de mi?”

Andrea fingió estar molesta y luego intentó congraciarse: “Ay, si es por lo de las fotos de hace unos días,

estoy enojada, ¿por qué te lo tomas a pecho? Después de todo, fue Cloé quien te puso los

vo ya no e

yo

cuernos, no yo…”

“¡Andrea!” Isaac la reprendió con severidad, como queriendo alejarla.

amigos, voy a saludar. Andrea nunca

ni siquiera escuché lo que Isaac respondió. Ya no importaba. No había más opción que aceptar.

“Cloe.”

de llegar a la puerta, cuando David, tras intercambiar unas

con una sonrisa cálida dijo: “Vamos,

“De acuerdo. Gracias.”

tú eres la mujer que lo ha tenido preocupado. No está mal, no me sorprende. que mi hijo

chica que le gustaba a David.

a hablar, David respondió con indiferencia y precisión: “Cada quién es responsable de sus propios actos, no

ajustó el chal de piel que llevaba y con una ceja levantada dijo: “¿Y esa prisa? Solo le dije

a David en el templo, era totalmente diferente. Aquel dia, era más como si lo mirara desde arriba, casi como si David fuera

mantuvo ecuánime mientras le decía: “Ella es

parecía escéptica y claramente no

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remedio, dije: “Señora Guzmán,

señalé a Isaac que en ese momento

abajo preguntando: “¿Tú eres… la esposa con la que Isaac se casó en secreto hace tres años?”

si no me crees, puedes preguntarle

cual, me giré hacia David, frotándome las manos y sugiriéndole: “Vamos, hace

mucho frio.”