Diario de una Esposa Traicionada

Capítulo 482

Ella había vivido en la base de la sociedad por más de veinte años, y entendía perfectamente qué tipo de personas atraian a los fanáticos de esos estratos.

Al entrar al patio donde se realizaría la grabación, saludó uno por uno a sus colegas.

Teniendo la identidad de la hija de Rosa Yáñez, casi tod

En cada rincón había cámaras y productores, y Salomé s impresión de ser la chica de al lado frente a sus mayores.

ibieron con gran calidez.

Diraba un poco confundida pero muy obediente, dando la

Incluso trajo regalos para cada persona, incluyendo al equipo de dirección.

Uno podia imaginar que, una vez el programa comenzara, no faltarian elogios hacia ella.

No fue hasta que entró a su habitación por la noche y cubrió la cámara con una prenda, que su expresión se tornó seria, y corriendo al baño, llamó a David.

¡No tenía idea de cómo estaría él!

David, sentado en la oscuridad y mirando su teléfono que no paraba de sonar, estaba irritado.

contestó, la

contestó, Salomé tomó una profunda respiración, urgida, preguntó: “¿Cómo planeas resolver

el día. Incluso tuvo que actuar frente a las cámaras.

se frotó el entrecejo, también sintiéndose un

de entrar al baño y recoger unos cabellos para darle a Salomé y así resolver la situación.

la puerta, se

baño, solo había cabellos de

preguntar, “¿Y

“Cloé…”

lo que él sentía por Cloé, titubeó, “Ella,

noche? Antes de que pudiera preguntar

viva y radiante, hacía mucho que David no la veía. La pregunta que no alcanzó

“¿Esperar cómo?”

se frustró, “Si seguimos demorando, en lugar de esperar a que Rosa descubra todo

te

frialdad amenazante, “Si arruinas mis planes,

le importaba si Salomé era descubierta por

pudiera darse cuenta de que Cloé podría ser su

de Rosa Yáñez, la señorita Monroy, cualquiera que fuese reconocida exitosamente,