Capítulo 154

Luisa extendió su mano temblorosa para recibir a Asier: “Asier, llegaste, déjame verte”.

Asier se acercó a la cama, y Benjamin se hizo a un lado

Asier se sentó junto a la cama y tomó la mano de Luisa: “¿Qué dijo el doctor, la enfermedad es grave?”

Anteriormente por teléfono, Asier habia rechazado firmemente la sugerencia de su abuelo de que volviera para discutir asuntos matrimoniales con Betiana

Usó su desagrado por los niños como excusa, instándolos a adoptar en un orfanato

Solo hizo esto para que dejaran de presionarlo para que se casara, y nunca pensó que podria molestar a su abuela.

Pero su abuela fue hospitalizada por eso, y Asier se sintió apenado y un poco culpable.

Cuando Asier era muy pequeño, sus padres murieron en un accidente y fueron sus abuelos quienes lo criaron y educaron.

Para él, su abuela era la persona más importante

“No pasa nada, abuela, es solo que tu vieja enfermedad ha vuelto, una transfusión te ayudará a recuperarte.” La mano de Luisa, sostenida por él, se calmó mucho, y su rostro llevaba una sonrisa bondadosa

Tu abuela está ansiosa por ti. Ya tienes treinta años y aún no te casas. Por eso es que nos preocupamos tantos. Casate y ten un hijo temprano, mientras tu abuela y yo estamos bien, podemos ayudarte con el niño”, dijo Benjamin, frunciendo el ceño, mirando a Asier.

Al escucharlo decir esto, Luisa asintió, apretó suavemente su mano y dijo. “Si, Asier, ya no eres joven, debes comenzar a considerar los asuntos importantes de tu vida. Betiana es una buena niña, ustedes han tenido un acuerdo matrimonial desde pequeños”

Dicho esto, la mirada de Luisa se dirigió a Betiana, que estaba parada no muy lejos de la cama.

Betiana entendió y se acercó, llamando dulcemente: “Abuela”

Entre todas las hijas de las familias ricas, Betiana no era la más destacada. Tenía ojos grandes y barbilla puntiaguda, era similar al tipo de cara de las influencers populares de hoy en día. Pero su cuerpo era pequeño y curvilineo, con pecho y glúteos rellenos, lo que la hacia irresistible para los hombres. Ese día llevaba un vestido corto y ajustado de diseñador negro, mostrando sus delgadas piernas, lo que hacia que su piel pareciera suave y brillante. Llevaba una chaqueta corta de piel blanca de marca, su pelo rizado caía sobre sus hombros, su maquillaje era exquisito, y todo su cuerpo desprendia un aroma dulce.

de tacón alto blancos de ocho centimetros, se veia deslumbrante, era claramente una dama de alta sociedad construida con

niña” Al escuchar la voz de Betiana, Luisa se sintió dulce por

obedeció y se acercó, llegando muy cerca de Asier a su derecha. Sus grandes ojos, como los de

hombre era serio y sombrio, con rasgos marcados

un encanto masculino, lleno de

solo lo miró de reojo, y su corazón empezó a brincar como un

agachó al lado de la cama de Luisa, y se recostó intencionalmente hacia Asier

la rodilla de

con sus profundos ojos negros y calmadamente se

se sintió decepcionada, sonrió dulcemente mirando a Luisa

Betiana, sus intenciones eran tan claras como

de Asier hacia la mano de Betiana en el borde de la

la de Betiana, Asier de repente agarró la mano

ambas manos, con una expresión cariñosa en su rostro “Abuela, la

itulo 155

tengo 25 años, ya no soy una niña”, Betiana giró la cabeza para mirar a Asier, su

brillaban como

vez que lo vio, le dejó una impresión profunda.

lider del Grupo Griera, era extraordinariamente capaz, un hombre sin igual.

tan sobresaliente, incluso

de Betiana estaban escritos en su cara, sus ojos estaban llenos de cariño por él, solo

ninguna razón la convenceria. Benjamin también estaba impaciente, interrumpió En verdad,

la iniciativa, ¿qué razón tendría Asier para dudar?

Como

no había un matrimonio mejor que

La abuela Luisa

Asier se oscureció, y dijo: “Ya tengo novia”

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