Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capítulo 366

El hombre entró con un aire deslumbrante, como si fuera un encantador demonio. Su rostro anguloso se cubría de una capa helada, enfriando el aire a su alrededor

Asustada, Elia contuvo la respiración y rápidamente colgó el teléfono, escondiéndolo detrás de ella.

Asier se acercó con grandes zancadas, agarrándola por los hombros con su enorme mano. Su expresión era gélida y furiosa: “Damelo!”

Se escuchó su voz autoritaria, su tono de voz era frío y aterrador.

Elia lo miró con sus ojos brillantes llenos de miedo.

La presión que ejercia Asier era demasiado poderosa, y Elia, incapaz de resistirla, cedió y le entregó el teléfono que había estado ocultando.

Apenas lo tuvo en frente, Asier lo arrebató de sus manos. Abrió el teléfono, su rostro se tornó más oscuro, y preguntó con rabia: “Dime el código de desbloqueol

“Seis unos“, inmediatamente le dijo Elia sin atreverse a ocultar nada.

Asier tecleó los seis unos en la pantalla del teléfono y este se desbloqueo al instante g2

Observo a Elia con sus oscuros y profundos ojos, luego abrió el registro de llamadas.

llamada fue a Rosalinda,

hablando

el teléfono sobre ella, que

tan misteriosa si solo estabas hablando con

fascinantes, con largas pestañas que parecían pequeños abanicos y párpados dobles marcados,

esos hermosos ojos, cuando estaban enfadados, eran como los de una bestia salvaje, llenos de una

fuerza mental considerable para resistir su

y su ansiedad la mantenía en tensión. Bajo su fria mirada, negó con la cabeza y dijo: “No tengo ningún secreto, solo… solo estaba hablando mal

supuesto, tenia

era el secreto de tener cuatro hijos escondidos?

secreto que nunca

era helado y su mirada más fria aún: “¿Qué derecho tienes para hablar

la vuelta

el ceño,

sobre si

hecho mal?

un error no querer

joven, sedujo a su madre, pero eso no fue culpa de ella.

solo se habian encontrado recientemente y él

era simplemente un extraño con el que

considerada como la