Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capítulo 476

Su beso, mezclado con el aroma masculino, se enredaba en su delicado cuello.

Elia tembló sin poderlo evitar

Su sangre comenzó a hormiguer

Instintivamente, abrazó su cabeza, inclino la suya hacia atrás y suspiró con voz entrecortada, Sr. Griera, todavia tengo manchas de café en mi cuerpo, no sería bueno si mancho tu ropa.”

Asier, acariciando su piel con los labios, su voz era muy ronca Te llevaré a la ducha”

La cabeza de Ela zumbo, su intención era decir que estaba llena de manchas de café, que él no debería tocarla.

Quien sabia que su pensamiento no era el mismo que el de ella

Apenas termino de hablar, Asiel agarró a Elia, fácilmente fue levantada por él y se dirigieron al baño.

Elia instintivamente se aferro a su cuello, al ver que se acercaban al baño, se puso cada vez más nerviosa y dijo: “Sr. Griera, puedo caminar por mi misma “g2

Nos bañaremos juntos” Su voz era ronca, y no dejaba lugar a ninguna discusión.

La puerta del baño fue pateada por él al entrar y cerrada al salir

habitación alquilada no era tan grande como la Villa Serenidad, y el baño era aún más pequeño apenas cabía una persona

fuerte, haciendo que

lleno de su dominante aura, su fuerte esencia

incluso no se atrevia a respirar.

distracción, Asier le

también se quito la ropa.

la llave de la ducha, y el agua caliente cayó desde lo

de que pudiera recuperarse, fue

esbelta y perfecta figura, estaban llenos del

respiración de Elia

cuello, al ver su sensual nuez de Adán moverse, su sangre empezó a hormiguear

a perseguirme?” Elia luchó por reprimir el latido inquieto de su cuerpo, este estado la asustaba. Ledijo eso a propósito para decirle algo que él encontraria irritante, que lo hiciera odiarla, esperando que él se desilusionara de ella. Asier, quien besaba su cuello, se detuvo por un momento, sus

y helada “Entonces, debes pagar el precio correspondiente Soportar

abrazó su cuello con fuerza, levantó la cabeza, el vapor llenaba el cuarto, vio la luz del

las diez de la noche

la

esbeltos dedos sostenia un cigarrillo, su rostro se mantenia apuesto y serio mientras fumaba, el humo se enroscaba a

la casa, asi que apagó la colilla entre sus dedos, la tiró a la basura, se

estaba acostada en la cama, escuchó el sonido de la

Tensos se relajaron un poco

volviendo cada vez