Capitulo 539

Ella se asustó hasta el punto de derramar lágrimas, pero no se atrevía a llorar en voz alta, su sollozo era suave y cuidadoso, pero estaba aterrada.

Con su aspecto temeroso, buscaba un lugar para esconderse, pero no había nadie en quien pudiera confiar

Solo podia quedarse alli, llorando sin rumbo, temerosa e indefensa, sus pequeños hombros temblaban.

Asier frunció levemente el ceño, extendió su largo brazo y levantó a Inés

Abel y Joel se acercaron al mismo tiempo, mirándolo desafiante.

“No se te ocurra lastimar a mi hermanita!”

“¡No se te ocurra lastimar a mi hermanital”

Los dos pequeños casi hablaron al unisono.

Lo miraban desafiantemente, mostrando su valentia.g2

Su abuela les habia dicho que una familia debía estar unida, que podian sufrir en casa, pero que nunca permitirían que alguien de afuera los lastimara

había asustado a Inés y

Asier la levantó, su

iba a ser reprendida.

cara con la palma de su mano, su voz grave nunca habia sido tan suave, consolándola “No llores más, te gustan

en su regazo, y mientras hablaba, la acercó a su pecho, temiendo que

suaves y

espiritu de lucha, se sorprendieron al ver esto,

a Asier y a Inés en sus brazos.

ver como Asier cuidaba a Inés con ternura,

cálido y suave como estar

se quedo sorprendida, las lágrimas brillantes colgando de sus pestañas, se olvidaron de caer, sus ojos inocentes miraron a Asier con temor

supuesto que es verdad.”

y dijo: “Me me gustan los broches.”

a Inés y camino hacia el patio trasero.

miraron

un helado y se lo entregó a Iria: “Señorita, aqui está tu helado.”

con alegria y lamió un

qué

temporalmente

de

por la comida, desde el corazón

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