Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capitulo 1161

¡Era Asier!

Al verlo, Elia se emocionó tanto que las lágrimas le corrian por las mejillas, y justo en ese momento, las llamas hablan llegado a sus pies, prendiendo la gasolina que cubría su cuerpo.

El fuego explotó en Elia con un estruendo, propagandose por su cuerpo en un instante.

aurel

“¡Elia!” Asier rugio, corriendo hacia ella y lanzándose encima para apagar el fuego con su propio cuerpo.

Pero como Elia estaba cubierta de gasolina, incluso con su esfuerzo, el luego no se apagaba del todo. Sin embargo, gracias a que él se habia lanzado sobre ella, las llamas disminuyeron un poco, y las cuerdas que ataban a Ella se rompieron.

Con movimientos rápidos y desesperados. Asier arrancó las cuerdas de Elia, intentando quitarse su ropa.

Si lograba quitarle la ropa, el fuego no seria tan intenso.

el cuerpo de Elia, su piel quemándose y causándole un

ropa de Elia, sin importarle

a Elia de las cuerdas y la ropa, se quitó su propia chaqueta

su

el fuego en Elia, la levantó y,

en sus brazos, temblando, mientras él, con el sudor corriendo por su frente, la abrazaba fuertemente, como si sostuviera un frágil tesoro invaluable,

su pierna, conduciendo a toda prisa hacia el carro y

no lo pensó dos

yacia en el asiento trasero, jadeando, su conciencia

trasero, el corazón de Asier

ya casi llegamos al hospital…” Asier conducia mientras hablaba con voz ronca y áspera, dándole esperanzas

luchaba por respirar y era incapaz de abrir los

la dificultad

te duermas, piensa en el niño que llevas dentro, tienes un niño en tu vientre, si te pasa algo, él tampoco sobrevivirá…” Las palabras de Asier eran ásperas,

y las enormes llamas, su cuerpo ya sin fuerzas, incluso la respiración

ella perdia la voluntad de sobrevivir, Asier ni siquiera queria imaginar las consecuencias.

si ella sufria un daño,