Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capítulo 1410

Jimena soltó aquella frase y la mano de Elia, que agarraba el volante, se tensó de repente.

Mientras manejaba, echó un vistazo a Jimena sentada en ei asiento del copiloto y una sonrisa amarga se escapó de sus labios “¿Qué está mal? Ahora mis hijos tienen un padre, y la verdad, eso es algo bueno.

Dado que Elia y Jimena eran las mejores amigas, habían compartido penas y alegrías, entre ellas casi no había

secretos.

Por eso podían hablar sin tapujos, sin miedo a decir lo que pensaban.

Jimena tampoco temia echar sal en la herida de Elia.

“Claro, tus hijos tienen un padre, pero ¿estás más contenta ahora que cuando los criabas sola? No hablemos de si ellos están felices o no, hablemos de ti. ¿Tú estás feliz?”

Los grandes ojos de Jimena, redondos y llenos de sinceridad, se clavaron en Elia.

Antes, cuando Elia criaba sola a sus cuatro hijos, aunque tenía que trabajar en varios empleos y estaba ocupada todo

el día como una abeja.

alegre y unida, siempre estaba llena de risas y cariño

padre de los niños, Elia vivía con el corazón en un puño, con miedo y

que Asier descubriera su existencia y se los

sus hijos. Asier los encontró

la persona más rica del mundo, se convirtió de la noche a la mañana en la más desdichada

era como perder el

Elia, Jimena podía entenderlo perfectamente ahora.

le echó un vistazo de reojo y vio

respuesta.

sabía lo que

los niños, de verdad se

había cambiado

que sus hijos pudieran estar con su padre y que ella pudiera estar al lado de Asier. Era la mayor muestra de misericordia y gracia que podía

sola. Pero en el fondo de cada niño siempre

vida sanar.

ella, que creció sin padre, siempre lo anhelaba y al mismo

Algunas penas, una vez superadas, dan

Jimena.

Había pensado que podía escuchar a Elia decir que desearía no haber encontrado