Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capítulo 1755

“¡Espera! La boda de Asier y Cecilia debe continuar hoy mismo“.

Al escuchar esa voz, Elia se detuvo bruscamente, mirando con pánico hacia la fuente del sonido. Vio a un anciano vestido con un traje formal, con una presencia severa y majestuosa, un rostro serio. A pesar de su edad, su aire de dignidad era como el de un pino milenario, recto y firme.

¡Estaba caminando con pasos firmes hacia el escenario!

Al ver quién era, el corazón de Elia se detuvo por un momento,

¡Era Benjamin Griera!

Con la llegada de Benjamin, Elia empezó a sentirse nerviosa por instinto.

Aunque ya había recuperado a Asier de las manos de Cecilia, Benjamin siempre habia mostrado desdén por ella.

su relación con Asier

llegado, seguramente venía a hacer justicia por

¿cómo iba a superar a estas personas?

nerviosa, de repente sintió un calor sobre el dorso de su mano. Al bajar la mirada, vio la gran mano de Asier

con callosidades ligeras, entre ásperas y secas, y

de su mano, siempre le

Asier, encontrándose con su mirada profunda.

Asier, solo sentia pánico, pero ahora, al ver esos ojos profundos, sentia

subido al escenario. Su mirada aguda como la de un halcón, apenas despreció a Elia antes de posarse en Asier, y dijo con gravedad: “Continuaremos con la boda

evidente que Benjamin estaba haciendo un trato con

lo que pertenecía a Asier, ¿no

el timón de la familia Griera?

fue ocupada por Pascual, quien también ganó el apoyo de los veteranos

parecia imposible que Asier pudiera recuperar la presidencia del