Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capítulo 1842

Orson se quedó sin palabras, incapaz de determinar si Priscila realmente se preocupaba por su hijo o si era completamente indiferente a su seguridad.

Por un lado, parecia preocuparse por el niño; después de todo, había dado a luz y lo había criado hasta ese momento. Pero por otro lado, ante la lesión del niño, en lugar de llevarlo de inmediato al hospital para revisar su estado, llamó a Orson, exigiéndole que se

presentara.

La indiferencia de Priscila era evidente al ver el gran chichón en la frente del niño y no mostrar ninguna prisa por atender la herida.

Si hubiera sido hijo de Jimena, ella habria dejado todo de lado, olvidado cualquier conflicto y llevado al niño al hospital para asegurarse de que estuviera bien, antes de poder estar tranquila,

Orson, ahora también era padre, aunque no había pasado mucho tiempo con Fred y Adora, los amaba sinceramente. Si Fred o Adora resultaran heridos, se pondria igual de nervioso.

No dudaría en hacer a un lado cualquier asunto pendiente para atender primero la herida en la cabeza de su hijo, sin distraerse con rencores entre adultos.

Priscila, en lugar de preocuparse por su hijo primero, acusaba a Jimena y usaba el incidente–para forzar

era lo primero. Nadie podia ocupar el lugar principal en su corazón, ni siquiera su propio hijo,

era la diferencia

que quería

aunque parecia descuidada y frívola, realmente se preocupaba por la gente a la que queria, especialmente sus hijos, a quienes valoraba por

de Jimena, probablemente era por esa bondad

Priscila nunca entendería por qué

hacia Priscila, Orson dijo: “¿De qué sirve hablar de esto ahora? Lleva

de decir eso, Orson se dio la vuelta

de pasos:

giró y le dijo: “Vamos, ¿qué estás esperando?”

de desprecio a Priscila antes de irse

queria decir, el

a llevar personalmente al niño al hospital!