Dulce Disparo al Jefe Cachorro Enamorado

Capítulo 189

Sube al auto ya!” Catalina instabo desde adelante.

Violeta ya habia puesto un pie en el auto, asi que no tuvo más opción que subirse con su cesta de comestibles

El BMW sequía avanzando hasta que se detuvo frente a la casa de la abuela Violeta estaba aturdida durante todo el vaje, desconcertada por la repentina aparición de tres personas.

Catalina fue la primera en bajarse del auto, aun llevaba tacones altos y sus manos estaban en su cintural diciendo, ¡Ay Dios mio, este lugar está demasiado lejos, estoy exhausta!”

Antonio, que bajo despues, protesto mientras sacudia las llaves del auto, “Catalina, si ful yo quien condujo todo el tiempo.

Pero antes de que pudiera terminar, Catalina le retorció la oreja y el empezó a lamentarse.

La puerta trasera del auto se abrió y aparecio Rafael, quien llevaba la cesta de comestibles y vestia un traje

elegante

“Tia, Dr. Antonio

Violeta miró a Rafael a un lado y pregunto con timidez, “Eh, vimeron al campo por algún asunto? Pasa algo?” “Venimos de vacaciones, dijo Catalina, guiñandole un ojo

“Vacaciones Violeta se quedo atónita

Miró a Rafael de nuevo. Esa familia

Catalina se estiro y dijo, Claro, este lugar es perfecto para disfrutar del campo!”

Violeta se quedó en silencio. Si no malinterpretó, Catalina habia dicho antes que ese lugar era terriblemente lejos..

“Ya hice arreglos con la familia que vive aqui, nos han preparado la casa Antonio, Rafael y yo vamos a pasar el fin de semana aqui Nos quedaremos una noche y mañana por la noche volveremos en coche. Llegaremos en la madrugada y no nos retrasaremos para el trabajo del dia siguiente Catalina agregó. Todo sera perfecto!

Violeta miro en la dirección que señalaba Catalina, era la casa vecina a la de la abuela

esa manana, vio a la señora de la casa limpiando con una escobal

lleva mi maleta

Antonio, quien se había convertido en su peón. A pesar de que solo se

lugar para descansar mis pics En la noche haremos una barbacoal

comenzo a coor

un montón de madera y la llevó a

mirar deliberadamente hacia la casa vecina, podia oir vagamente las voces

a dormir temprano después de la cena y no tenia intención de

las cosas no salian como uno

habis terminado de limpiar la mesa cuando

tres ya habían entrado. La abuela, que

ver a Rafael detrás de ellos

la miro, Violeta le explicó en voz baja, Vinieron a pasar el fin de

asintió al escuchar eso.

Soy la tia de Rafael, jes un placer conoceria! Vinimos a pasar el fin

hizo una señal a Antonio, quien trajo la maleta. Cuando la abrio, resultó que estaba llena de frutas, flores y suplementos

la anciana y dijo. Escuché

de su abuela, sintiendose incapaz de entrar en la conversación Una sombra cayó sobre ella y al levantar la vista vio a Rafael mirándola de cerca Le has contado a la

Violeta funció sus labios

la frente

cuando Violeta era muy pequeña. Si ella estuviera viva, sería de la misma edad que Catalina, por lo que no era extraño que la abuela se

sintiéndose segura, propuso: Señora, pensamos ir a hacer un asado al aire libre Podria Violeta

vayan la abuela respondió con

del

Llevaban un asador portátil y todos los ingredientes ya estaban preparados

sabian comer y no cocinar Violeta se encargó de la

estaba a punto de poner la carne en la parrilla, Catalina, con sus tacones

“¡Dios mio, ayúdame!

apresuradamente. ¿Que paso, lia?

a buscarla y también cayo! Catalina señalo