Dulce Disparo al Jefe Cachorro Enamorado

Capítulo 289

“Estos dos conjuntos me parecen bonitos, Nono, ¿qué tal si entramos para que los pruebes?”

Bianca seleccionó uno de los conjuntos, y después de decirlo con una sonrisa suave, intentó tomar su pequeña mano.

Pero Nono evadió su mano, claramente no queria probarse la ropa.

Al ver esto, Bianca no se enfadó ni se desanimó, sino que volvió a seleccionar varias prendas con una sonrisa en el rostro, como si tuviera una paciencia infinita. Pero a pesar de todas las opciones que le presentó, Nono no mostró ningún interés en ninguna ropa.

“¡Señorita, ya tengo el mate listo!” El conductor de Bianca entró apresuradamente, con una taza de mate en la

mano.

“Si. Bianca asintio y lo tomo, luego se inclino de nuevo ante Nono y dijo con confianza. “Nono, ¿ves lo que tengo en mi mano? Es un mate con dulce de leche, como el que tenían esos niños cuando entramos ¡Toma, pruébalo!

Al parecer se habia dado cuenta de que Nono había mirado hacia aquellos niños al entrar, así que cuando noto su falta de entusiasmo, inmediatamente le pidió al conductor que fuera por un mate, esperando ganarse su simpatia.

Pero, para su sorpresa, Nono no lo tomó, sino que se puso de espaldas a ella y continuó mostrando su cara enfadada.

“Es muy dulce, y sabe muy bien. ¡Pruébalo, si no te gusta podemos cambiarlo por otro sabor!” Bianca lo persuadió durante un buen rato, “Nono, ¿de verdad no quieres probarlo?”

Nono permaneció inamovible, como un viejo monje meditando.

Bianca, sintiéndose desanimada, se levantó y le pasó el mate a Lucía que estaba a su lado, “Lucia, ¡tomatelo tú!”

“Gracias… Lucia estaba a punto de cogerlo, pero la mirada fria del niño la hizo desistir, y dijo avergonzada Señorita, mejor no, no me gustan las cosas muy dulces!”

Bianca mantuvo la sonrisa en su rostro y finalmente le dio el mate al conductor.

Lucía suspiró aliviada, solo esperando que la visita al centro comercial terminara pronto.

estantes, incapaces de concentrarse. La imagen

incómoda. La idea de que Nono pudiera tratar a Bianca con la misma dulzura que a ella, la hacía sentir cada vez más incómoda. Tanto así que olvidó la lista de compras que había hecho y terminó comprando solo pedazos de tocino, cebollas y una caja

igual de distraida, con una mirada

de media hora, ambas salieron después de

tienda de ropa infantil y Violeta no

agachada frente a un espejo, sosteniendo una prenda de ropa infantil y comparándola con Nono, riendo y hablando con la

mirada y

pasaban, Nono, que estaba mirando su reflejo con una cara seria,

Capitulo 289

un rato, finalmente pudieron conseguir uno. Marisol entró primero y Violeta

era demasiado

la mirada y vio

“Vivi.”

dulce la dejó

a Lucía ni a Bianca. Se preguntaba de dónde había

levantó a Nono, aún sin reaccionar. “Nono, ¿cómo

al coche rápido!” El conductor se giró y le instó, “No se puede estacionar aquí por mucho tiempo, me

a alguien que parecía un policía de tráfico en la intersección.

por el conductor, no tuvo más remedio que subir

puerta del coche se cerró, el conductor pisó el acelerador y condujo el taxi a la

pulpo, con sus pequeños brazos alrededor de su cuello

la suya, y también estaba muy curiosa. “Dime, ¡joven señor!

sus mejillas, “¡No me gusta esa

gusta?” Marisol continuó preguntando.

pegó la cara a ella

contra ella, el corazón de

pronunció, no pudo evitar inclinarse

su rostro, luego se enterro en su pecho y