Capítulo 331

Catalina tenía asuntos pendientes y, tras prometer volver por la noche, se fue de la sala con Antonio,

Por un momento, solo quedaron ellos tres en la sala.

Al igual que aquel día en el zoológico, si alguien pasaba por la sala sin saber nada, pensaría que eran una familia.

Violeta sacó las frutas que había traído de casa y empezó a pelarlas. Al ver que Nono la miraba con ojos brillantes, le preguntó con una sonrisa, “Nono, ¿cómo quieres que corte la fruta?”

Nono, con los ojos brillantes, le respondió “Como un conejito”

A pesar de que las vendas en su cabeza eran un poco grandes, Nono se había despertado y se había comido toda la comida que le trajo Violeta. Su energía se había recuperado y su rostro volvía a tener color.

“¡Claro!” Violeta estuvo de acuerdo.

Así que, le hizo un conejito….

Cuidadosamente, Violeta comenzó a cortar la fruta en forma de conejito. Cuando terminó, Nono estaba tan emocionado que su sonrisa casi llegaba a sus orejas. “¡Vivi, eres increíble!” le alabó.

Violeta, halagada por el cumplido, le ofreció un pedazo de fruta en forma de conejo con un tenedor. “¡Abre la boca, Nono!”

Sin perder tiempo, Nono abrió la boca como si fuera un cocodrilo.

Después de comer la fruta, Nono exclamó, “¡Esto es genial!” Sus ojos brillantes parpadeaban y su voz suave decía, “Quisiera estar enfermo para siempre”.

“De esa manera, Vivi siempre estará a mi lado”.

“¡No puedes decir eso!” Violeta frunció el ceño, obviamente no estaba de acuerdo con su idea. Con un tono de voz serio, dijo, “Nono, tienes que ponerte bien lo antes posible. ¡Me preocuparía si no lo haces!”

Al escuchar esto, Nono recordó las palabras de su papa por la mañana. Temiendo que ella se preocupara y llorara, rápidamente dijo, “¡Soy un buen chico!”

“Sí, nuestro Nono es el mejor, Violeta sonrió, acariciando su rostro suavemente. “¡Eres el mejor niño del mundo!”

de terminar el último pedazo de fruta, Nono continuó

le hizo una señal a

que estaba pidiendo y sonrió mientras se inclinaba hacia adelante, acercando su rostro

más y

estaba a punto de darle un beso en la cara, una mano

y

una expresión tranquila, le explicó,

Violeta asintió,

sin miedo a que se enfadara. Después de todo, Nono estaba postrado en la cama y no podia moverse, y no había

hijo, Rafael sabía que Nono estaba molesto, pero no queria mostrar su frustración por miedo

Capitulo 331

Estaba tan enfadado!

que

punto de abrir una toallita húmeda para

preguntó, “Rafael, quieres algo de fruta

estuviera esperando

pelarte una,’ Violeta se ofreció, recogiendo nuevamente

pelarle una fruta. Cuando terminó, la voz calmada de Rafael resono, “Quiero una en forma

Violeta:

que ella le preparara a Nono, Rafael siempre quería lo mismo.

era el adulto aqui y quién era el

¿no te dijo el Dr. Antonio que pasaras por su

hay prisa” Rafael cruzó sus

¡quién sabe qué podría estar pasando!” Violeta le echó una mirada al Nono que ya estaba poniendo cara triste y

el ceño y finalmente, aunque no estaba muy

el ascensor directamente hasta el piso de ortopedia y con familiaridad encontró la oficina

“Toc, toc, toc…”

cerrada, así que golpeó un par de

bata blanca, estaba sentado en su escritorio, sobre el cual estaban dispuestas varias radiografias. Aunque su computadora estaba encendida, él no estaba mirando, sino que tenía sus manos. cruzadas y parecia estar pensando en algo

en la puerta, parecía volver en si, “Rafael,

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