Las flores Chapter 26

Cristóbal tenía la mirada fija en la hermosa Camill, el seguro Ceo no podia articular palabra, n o lo sé! no lo sé Camill! yo nunca me e enamorado de nadie, yo solo se follar, no doy más que eso! pero te juro que tú provocas algo en mi que no puedo descifrar, eres un completo enigma para mí, algo que ninguna mujer a sido nunca! 

La mirada de decepción que Camill le dio al poderoso Ceo que la tenía tomada de la muñeca, fue dolorosa para el hombre, pero que podía hacer? el no la amaba verdad? el no tenía sentimientos por ella ni por nadie, el simplemente no sabía amar

Sueltame Cristóbal! aléjate de mí, divorciemonos para que puedes casarte con Brenda, por lo menos con ella parece que tienes historia, en cambio nosotros dos somos dos completos desconocidos, rompamos todo y que cada quien siga con su vida, dijo una Camill con mirada triste

Cristóbal estaba leyendo la transparente mirada de la hermosa joven, por qué ella se sentía triste por él, Rodrigo Mendoza no se cansaba de gritar a los cuatro vientos que era a él a quien ella amaba, no entendía por qué la tristeza en la mirada de la ojiyerde mar

Camill soltó su mano de un solo jalón de Cristóbal, camino hacia el camastro, recogió sus cosas y se fue de inmediato hacía su habitación, una vez en el elevador dejó salir unas lágrimas, más ella no sabía por qué lloraba, ella no estaba enamorada del CEO de hielo ella estaba enamorada de Rodrigo Mendoza muy a su pesar

Soy una estúpida, si desde el primer momento sabía la clase de hombre que era, porque ahora me sorprende que siga siendo tal como es? un mujeriego que nunca amará a ninguna mujer! 

Camill entró a su habitación furiosa con ella misma, preparo la bañera con sales aromatizantes puso música en su celular y se dispuso a darse un baño, necesitaba relajarse, el día había estado muy extraño, ver de nuevo al que había sido el amor de su vida durante cinco años le removía e I mundo, por otro lado el imponente Ceo la descolocaba demasiado, era como si ella quisiera que él la llegará a amar

en la bañera Camill salió a secarse el cabello, estuvo otros quince minutos en eso, como no tenía una pijama para dormir, decidió ponerse el sensual vestidito pero sin el traje de baño, no le cubría mucho pero por lo menos no se sentía tan

n la cama

al espejo, puso crema en todo su cuerpo más cuando ya iba a meterse en la cama un Cristóbal muy apersonado leyendo

dio un grito

aqui listo para dormir

a llamar a seguridad para que te echen si no te vas por tu propio pie! dijo Camill dijo furiosa y destapó

Ceo estaba completarnenite desnudo que sabes que me gusta dormir desnudo! pero en tu casa por dios! estamos en una

tapar a Cristóbal para no verle su…. cómo le decía el Ceo… su anaconda, maldición esto debe ser una broma, por qué demonios estás aquí? que es lo que quieres de mi carajo? .

yo solo quiero dormir con mi esposa, no ibas a regresar a luna turquesa así que decidí venir a tu habitación para dormir juntitos, que tiene eso de malo? Cristóbal levantaba

estando casado conmigo?

puerta, Cristóbal saltó de la cama así desnudo,

creo que vengan a nada relacionado contigo, yo abriré la puerta! _ en tus sueños vas a abrir con ese vestido tan transparente, soy capaz de ahorcarte con mis propias manos si te atreves

refunfuñaba la bella joven desafiando al Ceo y cruzándose de brazos, Cristóbal la malmiró antes de abrir la puerta, afuera un mensajero le llevaba a Camill un costoso arreglo de flores, era muy lindo en realidad, éste venía acompañado con un pequeño sobre incrustrado, el mensajero dijo, el señor del restauran

el arreglo en las manos, el posesivo Ceo habría aventado el arreglo en la cara del joven más la curiosidad de saber quién enviaba el arreglo lo estaba carcomiendo, quién carajos era tan atrevido para enviarle flores a su esposa e n su propio hotel, esto lo tenía que ver con sus propios

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