Padre e hijo

En el camino el bebé Cristóbal de calmó un poco, Renzo lo iba alimentando mientras que el pequeño lo observaba detenidamente, de repente paraba de comer para llorar con sentimiento, ese hombre no era su padre Lo sabes verdad? eres un bebé muy inteligente pequeño Cristóbal, sé que no soy él, que tienes un vínculo muy fuerte con tu padre pero dame una oportunidad, no soy un mal sujeto, que te parece si vamos de compras y pasamos el rato? unos juguetes para ti y para mí unas corbatas nuevas!
Al bebé y le gustaba que Renzo le platicara, el balbuceaba siguiendo la plática pero igual de repente lloraba por qué no era su padre Renzo lo llevó a una plaza de lujo donde podrían encontrar todo lo que necesitaban, lo primero que compró fue un canguro para cargar al bebé en él, después entraron a la tienda de juguetes El bebé Cristóbal se interesó por un pequeño peluche que si lo oprimias hacía el ruido de un leon, Renzo se lo compro junto con muchos más juguetes, lo ató a una chuponera para que si lo soltaba no cayera al piso, el pequeño Cristóbal lo llevaba chupando por todo el recorrido Cuándo Renzo entró a la tienda de alta gama de corbatas, de robaba las miradas de empleadas y clientas, era muy cierto eso de que si quieres atraer mujeres sal a pasear con un bebé El Ceo reía para él, anduvo con el bebé mirando por toda la tienda cuándo una voz profunda, fría y llena de furia se escuchó Qué demonios haces con mi bebé Mandujano? Cristóbal estaba de pié, con su aura de frío emperador, quería matarlo ahí mismo, el Ceo tenía a su tesoro más preciado en su brazos El Ceo Mandujano se recompuso de inmediato, salimos de compras a pasar un tiempo juntos mientras Camill descansa, este pequeño diablillo no duerme de noche como ya lo sabes, no nos dejó dormir anoche y dejamos dormir un poco en casa a su hermosa madre Cristóbal sentía que algo en el pecho le estallaba, como sabía él que el bebé no dormía de noche, las palabras no nos dejó dormir eran acaso por qué Camill y él habían dormido juntos? Cristóbal ardía en celos, que generoso de tu parte dejar descansar a mi esposa, Mandujano! pero solo será por un un corto tiempo las molestias que mi familia te de, pronto estaremos juntos de nuevo y este mal momento quedará en el pasado! sonrió Cristóbal muy seguro de sus palabras mientras fijaba la mirada en su bebé Camill está muy decidida a dejarte atrás, dudo que sea momentáneo, ella no desea estar con un hombre que no la ama y que es un mujeriego empedernido, si la quieres siquiera un poco déjala tranquila, ella te va a superar y encontrará quien si la ame y la haga feliz! Alguien cómo quién? cómo tú? ella es mi esposa Mandujano, es mi mujer, ella es mía!
Ella no es tuya Cristóbal, su matrimonio es solo un contrato que acabará en unos meses, después ella será libre para elegir su camino!
Es mía! el que no lo aceptes es tu problema, mi esposa y madre de mi hijo solo está molesta conmigo por un malentendido, nunca le e faltado ni e tocado a otra mujer que no sea ella desde que nos casamos, sé que mi mala fama me precede pero ese Cristóbal ya no está más!

Ahora déjame cargar a mi hijo! Renzo no podía negarse aunque lo deseaba, Cristóbal era el padre del bebé, como deseaba que fuera suyo y dejarlo allí con un palmo de narices, no soportaba su arrogancia
Ven acá campeón! el bebé Cristóbal lo escuchó y lo miró, el pequeño movía sus piernitas y bracitos emocionado, de pronto el bebé hizo un puchero y un sonoro llanto se escuchó por toda la tienda
Cristóbal lo abrazó a su pecho, no llores mi pequeño papá va a solucionar toda esta situación, todo va a estar bien bebé tenle un poco de paciencia a papa!
Cristóbal besaba la cabecita de su hijo, apenas tenía un día fuera de la mansión y ya lo extrañaba muchísimo, quién es el bebé más hermoso del mundo eh? Cristóbal estaba tratando de contener las lágrimas, necesitaba recuperar a su hijo cuánto antes El bebé se calmó y le sonrió a su padre, escuchar su voz lo tranquilizaba, el pequeño se sentía muy cómodo acurrucado en el pecho papá, ese era su lugar favorito después de los brazos de su madre
Altamirano! ya terminé de hacer mis compras, ya nos tenemos que ir, dame al bebé Cristóbal, su madre ya lo debe estar extrañando
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