La posesividad de un Ceo El imponente Ceo estaba de los nervios ante los gritos de Camill, no había vivido un parto de cerca, definitivamente era como si torturaran a la madre hasta el cansancio, su mujer parecía estar agonizando del dolor Ya llegamos cariño! tú tranquila que pronto va a pasar, Cristóbal daba besos en la frente de la adolorida Camill

Por dios mujer apenas puedes Caminar, traigan una silla de ruedas enseguida! Benjamin recibió a sus amigos, él mismo no atendería a Camill por qué no era su especialidad pero si estaría para darle ánimos a Cristóbal

El ginecólogo de inmediato revisó a la futura madre, tiene ocho de dilatación la prepararemos para llevarla a quirófano! el doctor informó al Ceo y a Benjamin

Camill estaba en un grito, le dolía cómo el infierno, ella ya lloraba, no veía la hora en que su bebé naciera, Benjamin ayudó a Cristóbal a cambiarse con la bata esterilizada, el gorro y las botas, llevaron a su mujer a quirófano para empezar con el trabajo de parto

Puje Señora Altamirano, puje! de la mano de Cristóbal ella sentía que ya no podía más No puedo pujar más doctor, ya no tengo fuerzas ni energías! una enfermera secaba de la frente el sudor de Camill

Cristóbal no perdía detalle de nada, entonces la bebé se quedará en tu barriga Camill?

Eso es imposible señor Altamirano, la bebé tiene que nacer, ella no se puede quedar en la barriga de su madre

Entonces ya saquemela doctor, duele demasiado ya no puedo más! una fuerte contracción le llegó a Camill apenas y terminó de hablar, el instinto le ayudo a pujar fuerte, la bebé por fin nacía y lloraba a grito abierto

Camill cayó sin fuerzas en la cama mientras que Cristóbal observaba a su nena ser llevada a darle las atenciones, el parto se había adelantado no había tiempo que perder, debían revisarla minuciosamente

un momento la traerán para que la conozcamos! eres

Cristóbal! llamó Camill

Dime cariño, aquí estoy

no quiero volver a pasar por otro parto por el resto de mi vida, si no te haces la vasectomía no

y ya, dos hijos son muy pocos quiero tener una

demonio! Después de pensarlo un poco el Ceo respondió,

n

wad de un Ceo

eso decía que dos

ella estaba despierta ya no lloraba cómo cuándo salió del vientre de su madre, su piel era un poco más clara que la del bebé Cristóbal, al observarla detenidamente pudieron ver claramente que tenía los ojos

la recibieron y lloraron de emoción, el Ceo estaba muy feliz de haber podido. conocer a su hija, por un momento llegó a pensar que eso no sucedería nunca, Cristóbal le hablaba

a llamar? preguntó Camill Le llamaremos Daniela, Daniela Altamirano Rodríguez,

a los padres y la pequeña a una habitación privada, Benjamín se había encargado de decorarla con globos rosas y algunas flores, Camill se quedó dormida, estaba agotada, muy exausta, Cristóbal se había quedado al cuidado de su bebé, ella no despertó, solamente abría los ojos cuándo le tocaba comer, la enfermera se encargaba de llevarle un terero

paliza a tu madre eh? mírala parece que cayó en coma, Camill dormía, su belleza estaba allí intacta, aún acabando de dar a luz, le arrancaste hasta la

un hospital, Rodrigo Mendoza elegante e imponente como siempre dejaba salir el humo del cigarrillo que fumaba, daba las últimas instrucciones a sus eficientes hombres, ya había amanecido, el Ceo estaba ansioso

Elisa por todo el lugar y no la encontró por ningún lado, agotado se sentó un momento en la cama recordando la hermosa noche que había tenido con Elisa en sus brazos haciéndola suya, al voltear pudo ver entre las sábanas una mancha de sangre, Elisa dejó su virginidad en esa cama, amaba tanto a Rodrigo que no le importó cumplir la promesa que se había hecho de guardarse

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