El amor del Ceo mexicanoES by Pandora

ella ya no me ama

Camill

No tuve más opción que irme de la mansión, parece que Cristóbal no iba a cambiar de opinión, me aterraba pensar que con ese maldito vídeo pudiera quitarme a mis hijos, si eso pasaba yo prefería morir

caminé sin rumbo hasta llegar a una plaza comercial, no era muy tarde pero el cielo estaba gris y oscuro al igual que mi vida, el cuerpo me pesaba demasiado, el corazón me dolía cómo nunca, ni siquiera cuándo Rodrigo me engañó con Silvia se sintió remotamente igual

Al cruzar una calle un lujoso auto que no vi venir tocó el claxon, estuvo a punto de arrollarme y estaba bien, quizá me haría un favor al terminar con mi sufrimiento, ni siquiera volteé, seguí caminando lentamente hasta que unas fuertes manos me tomaron de los hombros Camill! ¿qué es lo que te sucede? ¿por qué estás así? pudiste morir! el Ceo Mandujano había encontrado a Camill caminando sin rumbo por las calles

Camill

No respondí las preguntas de Renzo, no podía hablar, la voz no me salía, era como si me lo hubieran robado de la garganta, solo pude arrojarme a sus brazos y llorar como una niña perdida, él… él me a echado de su lado… dije y me deshice en llanto en el pecho de quién había sido mi amigo y jefe

Renzo

a abandonarte, vamos! vamos a casa a qué te seques y cambies de ropa, llevó a Camill a mi auto y la subo como si fuera una muñeca de cristal a la que no quiero hacerle ningún rasguño, la sigo amando, solo con verla de nuevo puedo darme cuenta que mis sentimientos hacía ella no han cambiado, no tengo idea de lo que a pasado entre ella y Cristóbal, el Ceo Altamirano parecía amarla como

Camill

no soy capaz de razonar nada, solo me dejó guiar por Renzo, sé que es un buen hombre y doy gracias por qué me lo haya encontrado en el camino, no han pasado muchas horas pero ya estoy extrañando a mis hijos, tengo que recuperarlos o voy

brazos, el Ceo los observa doloroso, ahí están sus brillantes ojos iguales a los de su madre, era imposible no verla

la pequeña Daniela lloraba a su padre por su atención, Cristóbal entonces la tomó en sus brazos, el Ceo la abrazo a su pecho tratando de aliviar su dolor ¿cómo pudiste hacernos ésto Camill? destrozaste nuestra familia, nuestros hijos son tan pequeños, ahora que voy a decirles? Cristóbal ordenó a la mucama llevar a

a explicarle que si madre… dios! le costaba tanto

que decirte algo, eres muy pequeño aún para comprender muchas cosas, mamá y yo nos hemos separado definitivamente, ella… ella dejó de amarme y tiene un novio nuevo, lo último Cristóbal lo dijo en un murmullo, el aire

eran padre e hijo, el enorme ego ya lo tenían de

muy triste Pero donde está ella? está lloviendo mucho, mamá no tiene otra casa, no tiene a dónde ir, dile que venga papá! voy a preguntarle si ya no te quiere, voy a preguntarle si ya no nos quiere, el pequeño Cristóbal no entendía nada y lloraba por la ausencia de su madre Cómo le decía a su hijo que él mismo había prohibido la entrada a la mansión a Camill, joder! que pretendían que hiciera que la dejara jugar con su amor como si nada! la amaba demasiado pero su orgullo era grande, el solo imaginarla en brazos de otro hombre lo destrozaba, él no podría perdonarla Cristóbal Ella no vendrá por ahora, no estoy listo para

soy la luz de sus ojos! no podrá vivir sin mí! El Ceo sonrió, cuánto se parecía su hijo

ayudaba a bajar a Camill, ella no había dejado de llorar en silencio, Secan solo la observaba pensando que esa mujer era tan bella como un hada, Renzo la llevó de la mano a la habitación que era suya cuando estuvo viviendo allí estando embarazada del pequeño Cristóbal, como el Ceo bio que ella no se movía, tuvo