El despertar del Dragón

El hombre se quitó entonces la máscara negra, revelando un rostro cubierto de marcas de viruela. No era otro que Forero, que había dado a Sion dos talismanes de rastreo de Ciudad de Jade.

Tras observar su rostro con detenimiento, Jaime se dio cuenta de que no conocía a aquel hombre en absoluto.

—No te conozco, así que ¿por qué me has salvado? —preguntó con el ceño fruncido.

—Sólo quería trabajar junto a ti, eso es todo —respondió Forero con una leve sonrisa.

—¿Trabajar juntos? ¿Y hacer qué?

Jaime miró con cautela a Forero.

«Los cultivadores de energía como nosotros necesitamos una gran cantidad de energía espiritual para nuestro cultivo, y el mundo se enfrenta actualmente a un déficit de energía espiritual...».

de par en

estás aquí por

hizo una breve pausa, sorprendido, antes de

muy listo! Ahora veo por qué has conseguido engañar

¡o usaré la fuerza! —gritó Jaime mientras apuntaba a Forero con la espada

de la Espada Matadragones a centímetros

he entrado en la fase del núcleo dorado. Tú, en cambio, hace tiempo que has entrado en la fase de Alma Naciente. Dada la diferencia de nuestras fuerzas, podrías matarme con facilidad de un solo golpe, así que no tienes ningún motivo para temerme. Es decir, ¿qué podría hacer para herirte? ¡El pobre Sion no tiene ni idea de que necesita destruir completamente los cuerpos de los

sea experto en magia, todavía está en la fase del Núcleo Dorado. En otras palabras, se ha convertido recientemente en un Gran Maestro de Artes Marciales. Por lo tanto, es imposible que me haga daño, especialmente estando yo en guardia. Sin embargo, sería una historia diferente si activara su matriz arcana y me tomara por sorpresa. Tobías gastó mucha energía interna mientras luchaba contra mí. Eso, unido a su falta de conciencia, le dio al señor

guardia y envainó la

que los

la menguante cantidad de energía espiritual en el mundo, los cultivadores de

marciales más fuertes podían derrotarlos con facilidad. Por ello, muchos cultivadores de energía