El despertar del Dragón

Morir

En el momento en que su mano entró en contacto con el agua del arroyo, una oleada de energía turbia se filtró al instante en su cuerpo a través de las yemas de sus dedos.

La energía turbia corroyó rápido los órganos internos de Jaime en cuanto entró en su cuerpo.

Sin embargo, el cuerpo de Jaime recibió la protección del Poder de los Dragones, haciéndolo inmune a todos los venenos. De ahí que Jaime consiguiera refinar la turbia energía con la Técnica de Enfoque en un santiamén.

Poco a poco se puso en pie y entrecerró los ojos hacia Luol.

Alba se apresuró a preguntar:

—Señor Casas, ¿qué tal ha ido? ¿Es la misma agua que la del Manantial de Regeneración?

Jaime no le contestó. En su lugar, movió los dedos y lanzó un destello de luz roja a la mente de Alba.

Justo después, recitó el encantamiento calmante, y oleadas de frescor envolvieron sus cuerpos al instante.

abrir los ojos, se dio cuenta de que no había nada a su alrededor. Seguían dentro del bosque,

estaba asombrada, y la incredulidad

que vimos antes

mi hechizo de ilusión. Eres el primero

en el suelo volvieron a su mano. Al

una expresión amenazadora y exudó un aura

otro de ustedes justo después de matar a las Parcas Gemelas. —Al percibir el aura de Luol,

por un instante antes de pronunciar

eres el que mató a las Parcas

—¡Así es! —Jaime asintió.

Parcas Gemelas? Además, esta chica es sólo una Diosa de las Artes Marciales de Segundo Nivel. Incluso si ustedes dos unieran fuerzas, no serían

que Jaime fuera quien había matado a

culpable. Sin embargo, Jaime, un Santo de las

me crees. No obstante, al final creerás que lo que he dicho es cierto —dijo Jaime mientras sonreía

entrometido aquí, debes morir. Eso es porque sólo nosotros, los de la Secta del Cielo Ardiente, estamos cualificados para obtener las ruinas