El despertar del Dragón

Déjame intentarlo

—El verdadero potencial del señor Yura sí que es un secreto bien guardado. —Ángel suspiró un poco.

Los espectadores en el podio estaban asombrados mientras se concentraban en los dragones dorados en el aire.

Jaime era el único que hacía muecas como de dolor.

El Poder de los Dragones que llevaba dentro se sentía atraído por los dragones dorados que se elevaban en el aire, invitándolo a unirse a ellos.

Deseaba desatar el Poder de los Dragones y transformarse en dragón para acompañar a los de su especie en su vuelo.

Por desgracia, no podía hacerlo en público. De lo contrario, atraería aún más atención no deseada si más de sus secretos salieran a la luz.

Todavía no era lo bastante poderoso como para enfrentarse a ninguno de los Ocho Reinos Secretos Mayores.

Con desesperación trató de reprimir la inquietud que sentía en su interior.

Alguien entre la multitud gritó:

—¡Miren! El Señor Yura está levantando de nuevo el martillo de campana.

abierta mientras el aura de Quirino se elevaba sin cesar. Su expresión

por quinta vez. Pero era evidente que le

la Campana del Dragón, se lastimaría con

tiempo considerable, Quirino apretó los dientes y golpeó la campana

melodioso tañido de la Campana del Dragón resonó por toda la

y arrojó el martillo de la

la plaza quedó iluminada por el resplandor de los cinco dragones dorados que

escapó de los espectadores,

campanario y aterrizaba

que es usted un hombre

campana cinco veces, estoy seguro de que podría con un golpe más sin

que no sean duros con nosotros

de muchas de las familias prestigiosas se acercaron a

que bajó la vista y sintió

haber tocado la campana cinco veces. Nosotros, los viejos,

conferencia ya

y Sigfrido terminarían sufriendo una humillación aún mayor si se demoraban más y