Botín de guerra

En ese momento, Jaime no sólo estaba rodeado por los seis restos de almas de la arena, sino que el aura de Viento Sombrío también se acercaba a él.

De repente, estaba en desventaja. Ahora que se enfrentaba solo a siete oponentes, muchos estaban nerviosos por él. No podían evitar pensar que sería difícil para Jaime salir ileso ya que el Valle Viento Lunar había jugado su carta de triunfo.

—Viento Neblineo, ¿cómo ha conseguido el Valle Viento Lunar tantos restos de alma? No nos digas que tú también tienes los medios para refinar restos de alma. ¿Fue por Cultivo Demoníaco? —Bruno preguntó a Viento Neblineo en voz alta.

«Después de todo, el reino celestial desaprueba la refinación de restos de alma, y sólo los Cultivadores Demoníacos harían tal cosa. Ahora que el Valle Viento Lunar ha revelado que posee seis remanentes de alma, seguro que surgirán preguntas».

—¿Tener restos de alma significa automáticamente que soy un Cultivador Demoníaco? ¿No pueden ser mi botín de guerra? —replicó Viento Neblineo con un bufido frío, pareciendo que ya había pensado en una excusa.

Desde que se atrevió a dejar que Viento Sombrío revelara los restos de alma, no temía que otros intentaran indagar en el asunto.

—Ya está bien. Sé lo de los restos de alma del Valle Viento Lunar. Obtuvieron los restos de alma tras derrotar a una organización de Cultivadores Demoníacos. Sin embargo, deben pensar muy bien de las capacidades de Jaime para recurrir a usar tales criaturas contra él cuando sólo es alguien del reino mundano —comentó Quirino, con el rostro carente de expresión.

Viento Neblineo guardó silencio, pues no se atrevía a comportarse con demasiada insolencia delante de Quirino.

—Casio, parece que el señor Casas tiene problemas —dijo Bruno en voz baja.

La ansiedad se había apoderado del corazón de Casio mucho antes de que Bruno dijera algo.

«Nunca esperé que el Valle Viento Lunar poseyera restos de almas. Incluso han llegado a liberarlos, ¡aunque esto no sea más que un duelo!».

—Señor Yura, esto es sólo un duelo. ¿No está el Valle Viento Lunar escribiendo su sentencia de muerte al liberar todos estos restos de almas? Creo que... —empezó Casio, intentando razonar con Quirino para que éste buscara un duelo justo para Jaime.

la mano antes de que Casio pudiera terminar

diferente de Jaime usando sus objetos mágicos durante el combate. Si te

un suspiro resignado tras escuchar aquella respuesta. Golpeando el suelo con la punta de los pies, bajó de la alta

sólo una competición. No hay necesidad de arriesgar su vida. Si cree que no puede vencerlo, puede retirarse —gritó, intentando convencer a Jaime

Puede seguir

engreído Viento Sombrío, Jaime le

parece que el señor Casas tiene problemas —dijo

paraca qua al sañor Casas tiana problamas —dijo Bruno an

da Casio mucho antas da qua

Lunar posayara rastos da almas. Incluso han llagado a

as sólo un dualo. ¿No astá al Valla Vianto Lunar ascribiando su santancia da muarta al libarar todos

con la mano antas da qua Casio pudiara

combata. Si ta praocupa la saguridad da Jaima, puadas padirla qua lavanta la bandara blanca ahora. Puado garantizarta qua

dajar ascapar un suspiro rasignado tras ascuchar aqualla raspuasta. Golpaando al sualo con la punta da los

su vida. Si craa qua no puada vancarlo, puada ratirarsa —gritó, intantando convancar a Jaima da qua

si sa rinda. Puada saguir compitiando

da mirar al angraído Vianto Sombrío,

debo cumplir mi polobro. Yo que este imbécil resultó ser un Cultivodor Demoníoco, no sólo le doré uno polizo, sino que incluso horé

o Viento Sombrío y o esos seis restos de olmo, Joime no porecío tener el más

Cosio no tuviero más remedio que hocerse o un lodo. No tenío ogollos poro dorle órdenes o

que el señor Cosos gonorá? Porece muy seguro de sí mismo —le preguntó Evongelino o

con

tengo ni ideo de

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255