Esta Vez, ¡No Perderé!

Capítulo 155

Después de dos horas de viaje, llegaron al restaurante.

Cuando Felisa vio al hombre sentado enfrente, exclamó sorprendida: “Caramba, qué guapo es! ¿Es algún actor? Seguro que se haría famoso en todo el país con solo aparecer en pantalla”.

Beatriz tocó su bolso.

Listo.

El spray antiasalto no era necesario.

Nunca había visto a alguien protegerse asi hasta de su propio benefactor.

Hacia algo de frío ese día, y Javier llevaba puesto un abrigo negro. Su estatura lo hacía destacar entre los productores, Inversores y demás, mostrando un carácter especialmente distinguido.

Julio se quedó un poco sorprendido.

No esperaba que este inversor tuviera tantos contactos y conociera a Javier.

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en una cena anteriormente, por supuesto no iba a perder esta oportunidad de acercarse, sonriendo

visto.

rlash

ver la situación, rápidamente sacó su tarjeta de visita para dársela, y tanto Teo como Julio también se acercaron. Felisa y Beatriz, dos actrices emergentes, no se atrevían ni a respirar fuerte frente a los inversores y el productor.

en una fiesta, mi apellido

tantas fiestas que alguien que ni siquiera habia hablado con

hizo mantener una actitud

tarjetas de visita del productor y de

esperaba que Javier fuera tan amable en

al ver a Javier rodeado por un grupo de poderosos magnates, ni siquiera había podido

a almorzar? Sería un honor para nosotros“, preguntó

sorpresa, Javier aceptó la

apresuró a llamar a algunos

Mangone, del Grupo Mangone“.

con Javier: “Este es el

nunca había oído hablar de esta persona, al principio pensó

un gran ejecutivo ante quien incluso los mayores empresarios debian rendir

es necesario, debent saber cuándo inclinar la cabeza, ya que un paso en falso

Mangone, un placer, mi nombre es Gerard

Mangone, me llamo Felisa

la menos famosa, prácticamente sin reconocimiento alguno–bueno, algo de fama tenía, pero más