Esta Vez, ¡No Perderé!

Capítulo 333

Javier le pasó su móvil a Beatriz.

Beatriz revisó el álbum de fotos, que contenía solo paisajes y nada más. Era sorprendente que un hombre tan guapo nunca se tomara selfies.

Después de mirar, le devolvió el móvil: “¿Cómo hago el pago?”

Javier la observó de arriba abajo: “Cuando juntes los veinte mil, pagas todo junto.”

Beatriz se sintió un poco insegura: “Oh, está bien, ¿hay ropa? Quisieça irme ya.”

Javier aplaudió y la puerta del dormitorio se abrió de repente. Una empleada entró desde afuera, llevando en una bandeja un conjunto de ropa,

Beatriz estaba tan sorprendida por este acto que no pudo hablar; después de todo, solo había visto este tipo de escenas en la televisión.

La ropa que la empleada le habia preparado era un conjunto completo de Dior, incluyendo zapatos, parecia que todo superaba los veinte mil.

la ropa, Beatriz bajó las escaleras

se preguntó aún más: realmente este hombre se preocuparía por veinte mil?

gran jefe no decia nada, Beatriz

Gabriel ya habia

cocinar había sido despedida por intentar seducir a Javier, y Gabriel aún no encontraba a

todo, incluso cocinar a nivel de chef cinco estrellas, y habia preparado

preguntó con cautela: “¿Hay

momento, Gabriel sintió una opresión

muy diferente a la vivacidad

de tener relaciones con directores o con altos cargos del entretenimiento, todos sin pruebas, solo chismes. Y desde su debut, apenas habia conseguido buenos papeles, casi

repente un cariño paternal: “Si, Srta. Marchena, por

a su casa. Viajando en ese Bentley de edición limitada, Beatriz pensó que lo que Javier le habla dicho esa mañana parecia

comprarían ni un

una buena persona que la llevó consigo después de

bateria y,

del ascensor por Beatriz, se había torcido gravemente un tobillo y