¿Ya vienen los tres infartos?

Me bebi lo que quedaba de vino en mi copa de un solo trago, en un intento por quitarme el mal sabor de boca que me dejaba el solo hecho de volver a ver a las viboras ponzoñosas que no extra ba ni un poco. Ya comenzaba a entender porque Vincent tomaba su whisky

de aquella manera.

Sabia por las expresiones de burla en los rostros de Amelia y Gina, que no venian en son de paz, como si no hubiesen tenido

suficiente con la demanda millonaria en New York, sumándole el castigo del abuelo Lancaster por avergonzar a su familia

públicamente.

¿Cómo es que el abuelo Lancaster las dejó viajar a Paris?

¿Es que no aprenden de sus errores?

¿Cuanto veneno tenian guardado para escupirme?

¿Estás no son las mujeres que detuvieron en el cierre de la semana de la moda en New York? -la pregunta de Vincent estaba

demás, por supuesto que lo recordaba, pero estaba tan pasado de copas, que no pensaba con claridad, incluso arrastraba las palabras

aún más que antes. -Si son. Mira Sarah, tu suegra y tu cuñada. -le di un codazo a Vincent disimuladamente para que cerrara la boca,

pero me dejó en evidencia cuando se quejó de dolor.

Tanto tiempo con Abby lo estaba convirtiendo igual que ella, un ser imprudente e indiscreto.

Ja, solo en sus sueños volveria a formar parte de la familia Lancaster. -Amelia no dudo en burlarse deliberadamente y esbocé una

sonrisa como si estuviera disfrutando de su desagradable presencia.

Fra obvio que no tenia ni la menor idea de que las cosas entre Alexander van mejorando cada vez más y seguramente les dé el

mismo mal que cuando se enteraron de mi verdadera identidad, en el momento que conozcan a Tristán Lancaster, lo voy a disfrutar

mucho.

No sabia de cuanto estaban informadas sobre mi vida o sobre los más recientes acontecimientos, pero disfrutaré de su ignorancia

mientras pueda.

-¿Qué hacen aquí? No recuerdo que estuvieran en la lista de invitados. -no tenía ánimos de iniciar una discusión esta noche

tan bien y mucho menos con ellas,

que

más minima idea de cómo se habían enterado de este evento o

de uno de los gemelos Lancaster, pero, ni Alexander, ni

juicio en New

tiene un apellido importante y es la heredera de una empresa de moda. La que no debería estar invitada a un evento de tal magnitud, es usted, ¿no se ha enterado? Mi hijo, Alexis Lancaster, es accionista de esta marca, no nos hace falta una insignificante invitación, tenemos derecho de estar aqui. -tuve que aguantar la risa porque solitas se estaban humillando de nuevo, como si estuvieran muy orgullosas de estar en MI lanzamiento y fingi estar impresionada por aquella información, fingi que no sabia que Alexis era el socio de

aquí?

queda de otra que buscar un nuevo marido rico, solo un ciego podría fijarse en ella. -Gina no paraba de escupir su veneno con desprecio y miré mis uñas despreocupadamente, escuchando cada tontería que salia de sus labios. -Caballero, yo fuera

un poco de educación y modales, solo dan vergüenza ajena que vayan

callar y las pondria en su sitio cuando se den cuenta que están hablando con la dueña de la marca de la que tanto se jactaban y por la

sonaba furioso por la manera en la que aquellas mujeres se expresaban de mi, evidentemente, mi primo tenia la intención de defenderme de

los

ser un arma de doble filo y la iba

tienen en su pecho, que dejen salir todo el resentimiento. Solo están demostrando que los dias en la cárcel no le sirvieron de nada, siguen

y mirándolas con una ceja enarcada, continué. –Cuiden muy bien sus palabras y a quien van dirigidas, puede ser que para

queria compararlas con Rachel porque su caso era diferente y, además, su confesión fue de mucha ayuda, pero solo quería que se hicieran una idea de como les iria si segulan jodiéndome sin ningún motivo aparente, todo se lo han buscado ellas solas con sus

acciones.

en todos los idiomas, pero se limitó a fruncir sus labios con rabia y Gina, abrió su boca

de desprecio y

que yo la voy a amenazar? No, yo no haria una cosa asi. -respondi fingiendo estar angustiada por la malinterpretación de mis palabras y ambas volvieron a adoptar su postura de superioridad, perfecto para darles mis últimas palabras, antes de volver a la mesa y seguir disfrutando de esta hermosa noche. -Yo actúo sin previo aviso, tal y como lo hice en la semana de la moda en New York, supongo que lo deben recordar a la perfección. Más bien, considérense

del espectáculo, hoy es

ya estaba servidas sobre la barra y la levanté en el aire como seña de brindis, dejándolas atónitas y con fea expresión, antes de caminar junto a un inestable

y a mi cuñado?-aunque Vincent no tenia una novia oficial, sabía muy bien que se refería a Abby con aquello y

¿no lo has notado? Es su manera de demostrar amor. -respondi con evidente

matar y no descansaran hasta vernos hecho polvo, pero no es nada de otro mundo, son pequeñeces. -hice un ademán con la mano, restándole

una risita que nos hizo tambalear de

familia de mi primera novia. -asenti con mi cabeza dándole la razón y

pero mi sonrisa se esfumó al ver la escena en la

poco a Vincent.

todo se trataba de una actuación para la exnovia de Bastián, pero en este momento, no había motivos para

falsa se estuviera

en seco y me mirara sin saber

qué hacer, ni qué pensar en este

agua de los floreros

Vincent se decidió tan tarde a

qué Abby estaba

qué tenia que estar

alivio al ver que Abby se había separado de Bastián y lo esquivó cuando mi primo intentó darle otro beso. Dios mio, no queria ver el mundo arder. -¿Estás muy ebrio?-pregunté lo primero que se me vino a la

con ese vestido. -Vincent me soltó y se apresuró a llegar a la mesa, no me quedó de otra que seguirlo con los nervios

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255