Capítulo 859

ando bajó la vista, algún cambio en su cuerpo le hizo cambiar de mirada.

ué demonios…!”

urmuro, tomando una almohada y poniéndola encima de sus piemas

que no se ve, no molesta.

lo pensaba en cómo se veía esa mujer, y de repente se sintió estimulado.

o, ¿estás bien?

qué acabas de decir?”

escuchar la voz infantil de Violeta, Elio sintió un destello de culpa. Miró la pantalla del móvil, la imagen se movia tanto que le areaba, no podia ver claramente la cara de Violeta, la cámara del teléfono estaba apuntando a su ropa

1 cerdo de color rosa con la nariz hacia arriba apareció en el video.

ue estupidez

a maldijo a sí mismo, sin entender el gusto estético de los niños de hoy en dia

Qué tiene de lindo un estúpido cerdo?

Jada.” Dijo de mala gana, viendo como la cara linda y bonita de Violeta empezaba a aparecer en la pantalla. Como puede ese cerdo ser más lindo que esta cara?

so me recuerda un poco a esa mujer Perla, ¿acaso Perla también era tan linda cuando era pequeña?

Y tu extrañas mama? Habra besos, ¿sabes?

emerosa de que Elio dijera que no, Violeta se apresuró a mencionar lo mejor de todo.

‘arpadeando con sus grandes ojos, parecia que se preocupaba mucho por ellos

lio asintió, “La extraño mucho!”

lo dire a

sonrió felizmente, pero su rostro bonito cayó después de

grandes ojos brillaban, parecía que estaba

ablando, “Volveré en unos dias.”

asintió con fuerza.

Perla por un buen rato, así que finalmente no pudo

tu

voy a

“No…”

la imagen se movió, Violeta ya se habia bajado del sofá, tomó el móvil y pasando

no

abrió directamente la puerta de la habitación de

“Mamá

desordenada por Violeta, planeaba

desabrochando el vestido negro que llevaba puesto, oyó la voz de Violeta, se dio la vuelta,

se dio la vuelta, sin intentar cubrirse.

con Elio?” Preguntó Perla con voz suave.

golpe apagado

mostró a Perla a

fue a propósito!

¡Qué astuta!

he terminado la llamada

teléfono en su

has colgado?”

Elio quiere hablar contigo…

de Perla cambió de color, inmediatamente se cubrió, se puso la ropa rápidamente.

era oscura, pero la llamada aún estaba en

“¿Hola?”

del teléfono, seguido por

él estaba

su tono

detuvo de repente,

ceño, miró a Violeta que estaba acostada en su regazo, y no pudo evitar acariciarle

hables sin pensar.”

frunció el ceño, Yo

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