La Heredera del Poder

Capítulo 252

Aloir eso, Viviana quedó completamente desconcertada, y el poco sueño que le quedaba se disipó en un instante.

“Oficial de policia” tartamudeó Viviana, “mi esposo es un hombre honrado, nunca se involucra en actividades ilegales. Hay muchas personas con el mismo nombre en el mundo, seguro que se han equivocado!”

Tranquila, ciudadana, el oficial a cargo dio un paso adelante, “nosotros no acusamos a un inocente sin motivo, ni dejamos escapar a un culpable. ¿Donde está Simón? Que salga.”

“Él… él no está en casa, Viviana se interpuso en la puerta, impidiendo el paso de los oficiales. “Vayanse!”

El policia sacó una placa de su bolsillo. “Esto es una orden de arresto, le pido que coopere con la operación policial y no obstruya el cumplimiento del deber.”

Viviana tragó saliva, aunque interiormente no queria ceder el paso, sus pies honestamente retrocedieron varios pasos hacia

Los oficiales entraron uno tras otro.

No habia nadie en la sala, sólo un joven de diecisiete años sentado en el sofá comiendo pan.

“¿Dónde está Simon?”

El policia se volvió hacia Viviana.

Federico Yllescas se levantó del sofá, con el rostro pálido, dijo: “¿Qué le pasa a mi papá?

Un padre siempre ha sido como una montaña imponente en la mente de un hijo,

Los oficiales no querian que Federico viera la vergonzosa manera en que se llevarían a Simón, así que le dijeron con tono amable: “Joven, esto no tiene nada que ver contigo, vuelve a tu habitación.”

note

reaccionó, empujando a Federico hacia afuera, “Ve a casa de tus abuelos, tu papá está bien, no

preocupes.”

“Mama!”

trató de calmarse y dijo con tono ligero: “El oficial de policia solo vino a hablar con tu papá sobre algo,

tranquilizó y miró

se apoyo en ella y rápidamente las lágrimas comenzaron a

las cosas que Simón habia hecho.

esperaba era que la retribución

interior continuaron con el tema anterior preguntando. “¿Dónde está Simón?”

esta vez no podia esconderse, “Está en el

con cabello rapado: “Esteban, lleva a Leo

la

se dirigieron al

la cama durmiendo profundamente, hasta que las frías esposas lo sujetaron y abrió los ojos somnolientos. “Querida,

lugar de Viviana, Simón se

frio le

“Oficiales…

es nuestra placa y orden de arresto, Simón,

he hecho nada! ¿Por qué me arrestan?” Simón lucho con todas sus fuerzas

Varios oficiales lo sujetaron firmemente.

un abogado!

asintió con lágrimas en los ojos y acompañó a Simón

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que los oficiales se llevaron a Simón, Viviana inmediatamente fue a buscar a