La Novia Equivocada Novela de Day Torres
CAPÍTULO 122
CORAZONES ATADOS. CAPÍTULO 9. ¿Tu papá te dijo todo eso?
“Maddi, ¿me harías el increíble honor de dejarme ser el papá de tu bebé?”
Aquellas palabras dejaron a la muchacha paralizada, mirando a James con el ceño fruncido y los ojos abiertos como platos. Por un momento esperó que se tratara de un sueño, pero cuando lo miró a los ojos y vio su expresión seria, su corazón empezó a latir más rápido.
-Pellizcame…
-¿Qué?
-Pellizcame, porque no puedo creer que estés hablando en serio, ¡pellízcame!
¿Nos podemos conformar con una nalgada suave?
-¡James!
—¡Ya va, ya va! —James le dio un pequeño pellizco en la mano pero ella ni siquiera gritó. Solo hizo un puchero y asintió mientras las lágrimas caían de sus ojos. ¡Oye, si te propongo esto es para que te pongas feliz!
James se levantó y la estrechó en sus brazos. Maddi le devolvió el abrazo con desesperación mientras ocultaba el rostro en su pecho y por un rato él la escuchó llorar, aunque
de alivio.
sabía
que era
-Todavía no me has dicho que sí murmuró y Maddi levantó el rostro hacia él.
-Claro que sí… -susurró. Por supuesto que sí. ¿Cómo podría decirte que no quiero criar a mi bebé contigo después de todo lo que has hecho por nosotros?
James sonrió y le dio un beso suave en la mejilla que la hizo a ella contener el aliento y a él
estremecerse.
-¿Sabes que significa? -Maddi se frotó la mano contra su estómago-. Que esto ya es oficial.
-Sí–sonrió James de oreja a oreja-. Ya se siente como oficial. ¡Voy a ser papá! 1
Su cuerpo vibraba de la emoción y Maddi le dio permiso de hacer un bailecito de la victoria.
¡Con que no saque tu ritmo estaremos bien!
se burló Maddi.
Realmente se veía feliz, tan feliz que ella se preguntó por primera vez si James había estado fingiendo todo su buen humor hasta ese momento, porque antes era afable pero ahora parecía un niño en plena Navidad. Una débil sonrisa se dibujó en su boca cuando él volvió a abrazarla con fuerza. James ocultó rostro en el cabello de Maddi, respirando profundamente, mientras se preguntaba si aquel olor a jabón y lavanda era algo que ella llevaba consigo o si simplemente estaba en la habitación. Lo que fuera, le encantaba.
-preguntó Maddi
venga el bebé.
que hacer para Tenemos que mudarnos, comprar ropita, la cuna, biberones, pañales y… y… ¿qué más usa un bebé? -James hizo un puchero y
él pasaba un brazo sobre sus hombros y salían de
completa locura. James siempre encontraba algo más que quería hacerle a la casa, algo que mejorar.
echa la casa abajo y
-¿Puedo?
ella-. Yo ya quiero mudarme para organizar las cositas del bebé,
no me
sin remodelaciones–le advirtió ella y James
esperando en la puerta. Se subieron al
embargo si Maddi esperaba silencio y paz estaba muy equivocada, porque los recibió un enorme cartel de
felicitó por su nuevo hogar, haciéndola sentir parte de aquella familia. Muy pronto los chicos secuestraron a James para darle consejos y lo ayudaron con los últimos toques a
junto a Meli cuando finalmente las niñas la dejaron un momento tranquila-. Siento que todo esto es gracias a
gracias a mí -le respondió Meli con una sonrisa-. Esto es todo James. Es un poco
murmuró Maddi observándolo y Meli sonrió cuando se dio cuenta
que sí, y lo bruto siempre se
-se rio Meli.
eso lo estaba correteando allá en su casa? se
gesto las dos fueron a la cocina-. Te compré un par de sartenes que te van a servir, no
de la manga de su padre y señalaba hacia la cocina con expresión de espanto.
mi madre a Maddi y por qué tienen un par de sartenes en
un momento y palmeó
heredera de tu madre. Estás jodido.
C
simplemente hermoso y para cuando despidieron a todos en la noche y se quedaron solos, los dos se dejaron caer sobre el columpio de la
Vamos a tener que poner una cama en el cuarto del bebé, porque ahora mismo ni siquiera soy capaz de llegar allá
dentro de él, algo que no era capaz de explicar, como si todas aquellas mariposas muertas de su estómago estuvieran intentando desesperadamente revivir. También es tu familia ahora -murmuró y la vio asentir
hablándole a su pancita. Tenemos una familia grande y loca
se inclinó y le acarició el vientre por encima
madre te engañe, no somos locos, solo tu abuela Meli, pero ella no lo ve
estás diciendo bruja? -preguntó Maddi haciendo
vi con el sartén!
puedo! -lo retó Maddi y dejó escapar
su cuello y se dejó llevar, no porque no pudiera hacerlo sola, sino porque aquella sensación de sentirse
poner
corriendo desde tu habitación a la mía…
importante –. Igual voy a tener que
reacción, pero la verdad era que solo de imaginarlo sentía un escalofrío recorrerla… y no era nada decente decir
Leer La Novia Equivocada Novela de Day Torres CAPÍTULO 122 Leer La Novia Equivocada Novela de Day Torres novel CAPÍTULO 122 La lectura La Novia Equivocada Novela de Day Torres de Day Torres ha sido actualizada al capítulo CAPÍTULO 122 . En CAPÍTULO 122 de la serie La Novia Equivocada Novela de Day Torres, Nathan King es el hombre más poderoso y rico de la ciudad. Su riqueza hace que ya no crea que las mujeres acuden a él por amor, hasta que conoce a Amelie, una chica pobre. El destino los ha emparejado, pero ¿se juntarán?... ¿Este $capítuloTítulo autor $autorNombre menciona algún detalle? Siga CAPÍTULO 122 y los últimos episodios de esta serie en Novelxo.com. La Novia Equivocada Novela de Day Torres CAPÍTULO 122 La Novia Equivocada Novela de Day Torres novel CAPÍTULO 122