Capítulo311

Oficina del presidente del grupo Hernández.

Recién terminada una reunión, Alejandro se recostó en su silla de cuero, mostrando, mostrando cansancio en su mirada. Seguramente el asunto entre él y Beatriz ya se había esparcido por toda la compañía. A pesar de ser el grupo Hernández, nadie se atrevía a hablar mal de Alejandro en la compañía. A menos que ese empleado ya no quisiera trabajar aquí. Ahora como vicepresidente de la junta directiva, tenía un gran poder en sus manos, sin embargo, su ánimo estaba muy decaído,

sin ningún rastro de felicidad.

-Quién hubiera pensado que las pérdidas económicas de Sánchez pudieran ser compensadas por Ema. Al parecer en estos años había estado desviando una gran cantidad de dinero en la empresa- César disfrutaba ver a Ema en problemas.

-Anteriormente, Zeus ayudaba a Ema con su deseo de enriquecerse. Ahora que Zeus estaba en prisión, Ema aún podía sacar cuanto se le antojase en dinero. Esto demostraba que detrás de ella había otras fuentes de ingresos- Alejandro palideció mientras un toque de frío pasaba por su

rostro.

-¿Será esa tienda de lujo llamada Evita Valenciana?

César parecía sorprendido y escéptico.

-Alejandro, ¿realmente esa tienda de lujo tiene tanto dinero detrás? Solo venden bolsos y ropa, ¿no

pueden ganar tanto?

-Has estado conmigo durante tantos años, ¿por qué sigues siendo tan ingenuo en tus

pensamientos?

Alejandro frunció el ceño, y, lanzó un avión de papel cuidadosamente doblado a el pecho de César,

-Detrás de esa tienda de lujo hay una enorme red de relaciones llamada la Ciudad de México, que

Puede que venda artículos de lujo, pero en realidad está

y beneficios, e

se estremeció, -¡Realmente subestimamos su astucia!

debemos subestimar a

fríamente, -pero para colocar a Ema

influencia en la Ciudad de

tenemos suficientes pruebas para actuar en su contra, y tampoco es

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odio, -¡Así es! ¡Algún

del proyecto de Ada Wang? – Alejandro cambió de

indiferencia.

de bodas de nuestro equipo y estamos listos para reunirnos

de Ada Wang en cualquier momento.

momento con cautela, -Alejandro, ¿no dijo

para hacerlo. ¿Por qué no cedes la organización

Estoy seguro de que

qué debería cederlo a KS

apariencia imponente, alzó la vista y clavó su mirada en César. -Le debo a

KS ¿Por qué debería darle la oportunidad a

de entender las ideas del joven, sus

misterio.

en el mundo de los negocios debemos ser los mejores para

la mirada, con labios fríos,

mundo empresarial,

ni por nadie. No

que el joven estaba celoso ahora.

su teléfono vibró sobre la mesa, era una llamada de

pasa? –

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