Capítulo484

Ema también estaba añadiendo más leña al fuego, haciendo ver a Clara como un demonio: -Desde

el principic, Clara ocultó su verdadera identidad como hija de Julio, se infiltró en su círculo para

ganar su confianza ¡y finalmente se casó con Alejandro!

Si reflexiona sobre todo esto, ¿no le parece que fue una conspiración cuidadosamente tramada por

ella? Afortunadamente, Alejandro no cayó bajo su influencia y se divorció a tiempo para

minimizar el daño. Si Alejandro se hubiera enamorado de ella, y ella lo hubiera controlado por

completo, sumado a que ella ha ganado su afecto y absoluta confianza, ¿no teme que poco a poco

se infiltre en el núcleo de la familia Hernández y se apodere de la dirección de los Hernández?

-No digas más, Irene no es así.

Fernando movió la mano con disgusto, aunque su ánimo estaba pesado: -Además, conozco a Julio.

Aunque puede ser mujeriego, es un hombre de gran integridad y principios. No creo que haya

criado a una hija de mala reputación.

-¡Papá!

-¡Abuelo!

en cuanto a la familia Pérez, en términos de posición social y

la familia Hernández.

en los Hernández y

vida?

como los Sánchez, podría entenderlo, pero Clara es

y ni siquiera se molestaría en hacer algo tan vulgar y

firmemente a Clara, y al ver cómo Ema avivaba las llamas, él se inclinaba aún más

Clara.

furiosa que casi quería correr y patear la silla de ruedas de

en cualquier caso, la señorita Pérez

frente a Fernando. Así que, con enojo, dijo: -Aunque puede haber problemas internos en nuestra compañía,

reprimirnos. La última vez fue con Ema y esta vez, debido a un pequeño asunto, llevó a Leona a la cárcel. Está atacando con fuerza para destruir por completo a la familia Hernández. ¿Ha pensado en que la señorita Pérez, que regresó a

primero sin dudarlo.

agarró los reposabrazos de la silla de ruedas, su pecho resonaba

haz que Irene venga a verme. En cuanto a este asunto, solo quiero

propia boca.

afuera

Maybach de Hernández Alejandro estaba estacionado frente a la

del coche para él.

apuesta y expresión fría, bajó

acercó lentamente y se estacionó a

instante, Hugo, se encontraba elegantemente vestido con traje, y

coincidencia, Sr. Hernández!

hora. ¿El abogado Soler hizo un viaje especial hasta aquí?

que no quiere que nadie vea, y quiere que usted lo resuelva?

se curvaron afilados como una

-El Sr. Hernández me

adelante.

que asumir esta

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