Clara se sintió conmovida en su corazón y se arrodilló frente a Laura, sonriendo brillantemente con

su hermosc rostro. -Conmigo a su lado, puede estar tranquila, señora.

Pol se quitó el traje y, con su alta y esbelta figura enfundada en una camisa blanca y un chaleco

gris, se dirigió a la cocina, con una elegancia que irradiaba riqueza.

Aunque Clara era una invitada, se sintió un poco incómoda al ver a Pol, miembro de la prestigiosa

familia García, cocinando para ella en su propia casa. Así que decidió seguirlo a la cocina.

-Permiteme ayudarte. En tu casa no tienes ni un cocinero, ¿hasta cuándo planeas cocinar todas

estas delicias tú solo? -dijo Clara mientras observaba la mesa llena de ingredientes de alta

calidad. Se remangó la blusa con decisión, sintiéndose inspirada para cocinar.

-No te preocupes, todos los ingredientes ya están listos, y cocinar mariscos es rápido-respondió

en voz baja y con una

humo. La cocina puede llenarse de humo, así que sería

de estar a

claros ojos se destellaron de asombro. -¿Cómo sabías

humo?

éramos niños? -comenzó Pol. -Julio te trajo a casa una vez, y

barbacoa en el patio trasero. Después de un rato, empezó a salir humo y Julio se puso nervioso y te sacó de allí, diciendo que eras alérgica al humo. Lo recuerdo

ternura. -Parece que eras la niña mimada de

amargura surgió en su corazón, ascendiendo lentamente a través de su garganta y

alergia al

Pol recordaba un pequeño incidente de

se ponía junto a él frente al fregadero y comenzaba a manipular los ingredientes

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se oscurecieron ligeramente, su garganta se movió con una emoción contenida y dio un paso más

visto, es que su memoria

Eso es uno de los síntomas del Alzheimer-suspiró

alegrarla? Te estaría

mirándola con preocupación.

sin previo aviso, y

reinaba una atmósfera

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