Mi Frío Exmarido

Capítulo 56

Capítulo 56

Amelia quedó sorprendida por la pregunta, instintivamente alzó la mirada hacia Dorian.

El la observaba fijamente, con esos ojos profundos y tranquilos, serenos y misteriosos, esperando paclentemente su

respuesta.

Amelia sonrió levemente, bajó las pestañas y guardó silencio por un momento. Luego, volvió a mirarlo: “¿Es tan importante para ti?”

Dorian asintió: “Para mí, si lo es.”

Sabía que se refería al asunto de Amanda.

*Si yo fuera ella, ¿qué harías?,” preguntó. “Y si no lo soy, ¿entonces qué?”

Dorian se quedo sin palabras.

Nunca había considerado esa pregunta.

No quería pensar en ello, ya que la posibilidad de que Amelia no fuera Amanda era algo que no quería contemplar.

Amelia sonrió de nuevo: “Tú la recuerdas porque compartieron muchos buenos momentos juntos. Pero si solo tú conservas esos recuerdos, ¿sigue siendo importante?”

El hombre la miró sin responder.

Amelia dejó de sonreír. “No tengo ningún recuerdo contigo, no pongas tus esperanzas en mí. Temo que te decepciones”

“Lo siento mucho.” Dorian se disculpó.

Amelia sonrió: “No importa.”

Ella miró el plato, ahora vacío y se levantó: “¿Regresamos?”

Dorian asintió con la cabeza y también se puso de pie. Justo cuando estaban a punto de irse, una conmoción estalló entre la multitud, seguida por un grito agudo: “¡Un robo, hay un robo!”

y delgado con una bolsa de mujer corriendo hacia ellos. Extendió el brazo hacia Amelia y en el momento en que el hombre los embistió, la giró hacia un lado, al mismo tiempo que su pie se movía hacia atrás con un golpe,

levantarse, pero la gente que acudió en ayuda lo empujó de nuevo al suelo y la bolsa de mujer que

pulsera de ángel Amelia se sorprendió. Por instinto, miró hacia la cara de la chica, sorprendida al darse cuenta

estaba siendo retenido y le lanzó una mirada fulminante: “Intentar un robo a plena luz del

por la mirada vengativa del hombre, se dirigió hacia Dorian

ver su rostro con claridad: “¿Eh?

tenía el desdén anterior, sino que parecía un poco sorprendida y

detuvo por un momento en la pulsera y luego se elevó lentamente hacia su rostro sorprendido y dijo con frialdad:

mano, que habia estado protegiendo la cintura de

por Dorian y saludó con la mano amigablemente: “¡Qué coincidencia

respondió con una sonrisa amable:

robo, preguntó

roban la bolsa, dijo Fabians com Indiferencia, señalando hacia

y Camilo en el estacionamiento del hotel y miró a

sonrió: “Vas a quedarte en el hotel

asi que me aprovecho un poco de él. Tengo comida y alojamiento grains, no tengo que gastar un centavo y de vez en cuando le saco

también está

concentro en él: “¿No me digas que tú también te estás quedando en el Hotel Esencia? Ese día te vi justamente en la entrada del

asintió levemente. Por ahora me

tengo un rato, voy a visitarlos, estar en el hotel es un aburrimiento

se volvió hacia Amelia. “Ustedes se están

Amanda,

qué decir, Dorian ya había asentido:

novios?” Fabiana miró curiosa

suavemente con la cabeza:

cambió de tema: “Esa pulsera que llevas es muy bonita, ¿dónde la

¿Qué tiene de bonito? Es horrible, solo la llevo porque me la pusieron desde pequeña,

luego a Fabiana: “Así que la has llevado desde

dicen que cuando me encontraron, ya tenia esta pulsera. ¿Ves el angelito que tiene? Ellos creen que fue el quien me cuido, que gracias a él me encontraron a salvo y he podido crecer sin problemas. Por eso no me dejan quitarmela. Fabiana terminó su relato sacando la lengua con vergüenza. “Mis papás son

debe ser

estaba

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