Mi Frío Exmarido

Capitulo 336

Amelia recibió el mensaje mientras esperaba en la sala de embarque del aeropuerto

Frida. Serena y Marta estaban junto a ella.

Esa mañana habia finalizado el traspaso de todos sus deberes con Rafael y poco antes del mediodía también había completado la comunicación con el cliente. Después de organizar todo en la oficina, salió rumbo al aeropuerto

Friday Marta habian ido por Serena y luego se dirigieron al aeropuerto juntas.

Dado que planeaban una estancia prolongada y el tiempo apremiaba, no habían elegido un destino con antelación. Simplemente tomaron sus documentos, un equipaje sencillo y se dirigieron al aeropuerto

Compraron los boletos de avión los al llegar, eligiendo el vuelo más próximo disponible y el destino al azar

Gracias a la temporada baja y al ser dia laborable, fue fácil conseguir vuelos.

No era su intención desaparecer sin despedirse, pero tampoco había forma de hacerlo con anticipación sin complicaciones.

Había escrito correos electrónicos para Rufino y Dorian explicando la situación y disculpándose, pero los habia programado para enviar más tarde.

También dejaría las cosas claras en el grupo de trabajo a su debido tiempo.

Al ver el mensaje de Dalia, Amelia miró su teléfono en silencio por un momento y luego le respondió: “No te preocupes, no lo tomes a pecho.”

La indiferencia de Amelia alivió la preocupación de Dalia, quien rápidamente le respondió: “Gracias, jefa.”

Aún preocupada, le pregunto: “¿Pero esto te afectará? Me parece que el Sr. Ferrer tomó el asunto bastante en serio.”

“No te preocupes por mi,” le respondió Amelia, “Yo me encargaré de eso. Tu solo concéntrate en tu trabajo y olvida el

resto.”

“Gracias, jefa, Dalia agradeció nuevamente con otro mensaje. “Por cierto, ¿dónde estás? ¿Volverás a comer? El Sr. Ferrer te preparó el almuerzo, todavia está en tu escritorio, quizás se enfrió un poco. ¿Quieres que te lo caliente?”

El mensaje incluía una foto de la comida aún sin abrir.

Amelia abrió la foto, donde se veia una abundante caja de comida muy bien empaquetada, descansando tranquilamente en su escritorio de oficina.

Mirando fijamente la foto, se perdió en sus pensamientos, recordando que esa mañana él la habia llevado a la oficina y le había dicho de almorzar juntos. Ella habia respondido que mejor por la noche.

Le había mentido.

En realidad, cuando le dijo a Rufino que no necesitaba tomarse un descanso, ya estaba planificando su viaje de ese

dia.

sentido algo, pero

ento creyó que ella

habia preparado Dorian ese almuerzo, probablemente en ese momento no se iría

triste, acariciando su teléfono con dedos temblorosos y

perdidas de Dorian

las habia contestado, ni se

esa tarjeta SIM

su lado, levantó la vista de su celular y notó los ojos

con la cabeza:

las lágrimas, respondió a Dalia con

|

teléfono, evitando mirar

con un cubo mágico y también percibió el cambio emocional de su madre, mirándola confundida

“No es

hacia la puerta de embarque

aún estaba

hora de embarque, no habia

también miró su reloj preocupada: “No será que el

negó con la cabeza: “No lo

“Voy al

a Serena en sus brazos:

las rodillas de

burlona: “¿No acabamos de ponerte un

baja,

Frida no pudo

poco avergonzada por la broma, pero no soltó la mano

también miró a Frida: “No hay problema, solo voy a lavarme las manos y

apurándose

y le lavó las manos

su mano, pero luego no pudo evitar mirar a Amelia y notar un leve enrojecimiento en las

hace un momento?“, preguntó dudosa, mientras Amelia cerraba el

suave: “No, mi amor. Solo fue una basurita que me

mucho

acurrucó suavemente en sus brazos y le

la garganta

fuerte: “También te quiero muchisimo,

un poco y se acurrucó más

y con cuidado le arregló la ropa y el cabello antes de tomar su mano y salir del baño. En la sala de espera todavía no habia movimiento,

no había sonado.