Capítulo 84

“Lo siento, yo…”

Las lágrimas de Lorena estaban a punto de caer, pero esta vez Sebastián no tenia intención de ser compasivo.

“Deberías saber las reglas de la Universidad del Nuevo Mundo, si tus calificaciones vuelven a caer tan drásticamente y no quedes entre los primeros de la facultad, perderás la beca y tendrás que pagar la totalidad de la matricula tú misma”.

Lorena siempre habia sabido de està regla, pero nunca imagino que esas palabras saldrian de la boca de Sebastián.

Miró a Sebastián conmocionada, sin poder reaccionar por un momento.

La intención de Sebastián no podria ser más clara: si sus calificaciones seguían bajando, él no la ayudaria más y no le ayudaria mantenerse en la Universidad del Nuevo Mundo. Todos los gastos tendrian que correr por su cuenta.

“Sr. Borrego, sé que me equivoqué, no volverá a suceder”.

Lorena se rindió de inmediato.

Hasta ahora, todos los gastos de Lorena en la Universidad del Nuevo Mundo eran cubiertos por Sebastián, quien además le daba mil dólares mensuales para sus gastos personales. Esto le permitia no tener que trabajar para mantenerse y concentrarse en sus estudios.

Pero sin este apoyo, tendria que buscar trabajo, ya que la matricula de la Universidad del Nuevo Mundo era exorbitantemente alta, llegando a los 30 mil dólares al año solo en matricula, más alojamiento y otros varios gastos, llegaba a sumar un total de 40 mil dólares anuales.

Era imposible que pudiera ganar esa cantidad de dinero por su cuenta.

“Mejor que lo sepas”.

dentro de un mes sigues con estas calificaciones, ya sabes lo que tienes que hacer

con una expresión

ni imaginar cómo sería su vida

Sebastián llegó a la entrada de la Universidad del Nuevo Mundo, justo

“Detente aquí”.

“Sr. Borrego, ¿quiere ir a

espejo retrovisor, Sebastián lanzó una mirada fria a Carlos, quien de inmediato guardo

que las luces del apartamento de Fernanda aún estaban encendidas y la llamó a

teléfono.

en silencio un momento antes de preguntar: “¿Qué sucede?”

que no vuelves

12

11:33

Capitulo 84

calma, aunque su tono revelaba cierto descontento.

“He tenido clases estos días. Te lo dije anteayer”.

sintiéndose algo sofocado. “Así que no has dado señales en tres

además tú estás ocupado”.

mañana, informa en tiempo

“¿Qué?”

trata de acostarte temprano”.

darle tiempo a Fernanda de responder, Sebastián colgó el teléfono.

“¿Hola? ¿Alo?”

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255