Capítulo 317

El Sr. Teobaldo, a pesar de todo, aún sentia que debía darle cierta consideración a Sebastián.

Al ver que Sebastian hablaba Sr. Teobaldo miró a Fabio, que estaba a su lado sin decir nada, y dijo: “Sr. Borrego, no es que no quiero darle importancia, pero……..

Con un tono claramente insinuante, Sebastián giró su mirada hacia Fabio y dijo friamente: “Al final, ¿quién manda en Laguna Verde, Sr. Teobaldo? Mejor piénsalo bien“.

Fabio, con un tono indiferente, dijo: “Quizás antes eras tú, Sebastián, pero de ahora en adelante, soy yo“.

El aire entre los dos se cargo de tensión.

En ese momento, el teléfono de Femanda recibió varias fotos.

Al ver las fotos, los ojos de Femanda se enfriaron instantáneamente, y cuando miró a Sebastión, su mirada se llenó de desden: “Se Bonego, ¿esto es obra suya?”

Sebastián no entendia qué estaba pasando.

y el contenido de las

que daba lugar a todo tipo de especulaciones.

Femanda dijo friamente: “Sr. Borrego cree que con estas

“Yo

el teléfono de Fernanda y al ver el contenido, su

caer sobre nosotros. Sebastian está aqui parado frente a ti, sabes muy bien quién te envió esas fotos“.

de inmediato: “Señora! ¡Esto definitivamente no tiene nada que ver

Sr. Borrego

St. Teobaldo y dijo serenamente: “Comisario, ya que el secretario del Sr. Borrego dice que él no intento secuestrarme, solo quería ayudarme a escapar, dejemos este asunto

“¿Dejarlo aquí?”

escuchado mal, miro instintivamente a Fabio, esperando su decisión.

Fernanda diga es como si lo dijera yo“, dijo Fabio, devolviéndole el teléfono

dijo el Sr. Teobaldo a los oficiales

Teobaldo ordenaba la liberación, Femanda se dio la vuelta y se marchó con

desden: “Ain dice que no será amenazada, pero al final, ¿no es porque teme por su reputación?

su ira, reprendió: “Callate“.

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