Capítulo 609

El Sr. Torres vio a Tula temblando de miedo y no pudo evitar sentirse más complacido.

Pensando en cómo había sido tratado por Fernanda y Oriol estos últimos dias, el Sr. Torres se acercó y arrastró a Tula hacia él

“Ah!”

Tula temblaba de miedo y su rostro palidecía aún más.

Las manos grasientas del Sr. Torres rozaron la cara de Tula mientras decia: “Nunca me habla dado cuenta de lo linda que eres. Si no quieres acabar alimentando a los peces, mejor me complaces bien. Si me haces feliz, te dejaré ir“.

Alci esto, Tula se quedó paralizada.

En ese momento, Fernanda se levantó y se acercó al Sr. Torres. Sus dedos, blancos como el jade, se deslizaron desde el pecho del Sr. Torres hasta su abdomen, diciendo: “Sr. Torres, Tula es solo una empleada. Seria muy poco hombre de tu parte desquitarte con ella por mi“.

El Sr. Torres, un hombre curtido en las artes amatorias, entendió inmediatamente lo que implicaba el gesto de Fernanda.

Femanda vestia unos simples shorts de mezclilla y una camiseta blanca que delineaban su figura exquisitamente. Sus piernas, blancas y suaves como el jade, llamaban la atención.

conocida en Laguna Verde como una belleza sin igual, con

iniciativa, el St Torres no pudo evitar sentir deseos.

duele mucho el brazo que me golpeaste, St. Torres, no deberías

seductora, lo que hizo al Sr.

sacudia la cabeza: “Srta. Fernanda, por

Cállate!”

Torres, al ver a Tula con lágrimas en el rostro, pareció

tomó a Femanda por la cintura, con una mirada lujuriosa, y dijo: “Vamos

a Fernanda, pero Fernanda le devolvió una mirada.

detuvo,

que podria salvar a

Pronto,

Sr. Torres llevó a Femanda a su habitación, llena del olor a tabaco, y

esto, Fernanda funció el ceño, sintiendose

el Sr. Torres la lanzó bruscamente sobre la

la señorita de la familia

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