Capítulo 529

“Señora Santander, los niños son muy pequeños. Tal vez deberia darles dinero cuando crezcan“. Sabrina se dio cuenta de que el ambiente se estaba volviendo extraño y tuvo que decir algo para detenerlo.

Mdm Santander era una señora inteligente. Dejó su pelea con Elena tan pronto como escuchó a Sabrina decir eso. Ella sonrió y dijo: “Está bien, escucharé a Sabrina y recuperaré el dinero por ahora. Se lo daré a los niños cuando sean mayores“.

“Por supuesto.” Sabrina asintió.

Sin embargo, Elena todavía tenia una cara larga.

A la matriarca realmente no le importaba lo que sentía Elena. Jugó con los niños unos minutos más y luego decidió regresar. Cuando salió de la mansión, los niños la siguieron y agarraron sus piernas, “Bisabuela, deberías venir a vernos más”.

Sonaban tan adorables.

La ternura del niño derritió por completo el corazón de Mdm Santander. Eran los angelitos que bajaban a bendecir a los santandereanos.

La matriarca se frotó la cabecita una vez más y subió al auto.

Gina, quien vino a la mansión a hacer un trabajo de limpieza, vio a la matriarca despidiéndose de los niños.

Parecia seria y trató de procesar la información.

¿Eran los hijos de Sabrina? ¿Cómo podía tener hijos tan grandes?

niños eran de

le pidió que investigara la información sobre los

estaba preparando la cena en la cocina mientras Sabrina miraba dibujos animados con

casa del trabajo y vio una gran canasta de rosas. Se tapó la boca con entusiasmo y dijo: “¡Guau! Sabrina,

Y los voy a devolver“. Sabrina miró rápidamente en dirección a la cocina y le guiñó un

Elena supiera que

¿verdad? Sabrina echó otro vistazo a la cocina y dijo: “No, es

el juego y dijo: “Una dama hermosa como tú

los niños por mí, por favor. Voy a devolver las rosas“, Sabrina tomó los brazos

tuvo ningún problema en ayudar a Sabrina. Sin embargo, tenía curiosidad sobre el

“Por favor, cuida a los niños por mi. Le devolveré las rosas

Cindy dijo: “¿Ustedes terminaron?”

a Cindy al oído: “No, no voy a romper con él. Pero me hizo enojar hace unos

sonrió y le dio un pulgar hacia

que nunca podría dejar ir a

buen hombre que arriesgaria todo por

agitó las manos y dijo: “Ve. Yo cuidaré

por ti

Para no levantar sospechas, le dijo. a la dirección de la cocina: “Elena, le voy a devolver las rosas a mi

dio la vuelta y la miró. Ella asintió sin

a ver a Fernando con las rosas en sus

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255