¿Es él? ¿Cómo es que también vino?

Evrie se sintió algo inquieta.

Desde que rechazó su propuesta la vez pasada, ver a Farel le provocaba una incomodidad enorme. Había pasado la semana entera evitándolo a propósito.

¡Y ahora se lo encontró aquí!

¡Qué suerte tan extraña!

—Ay, pero si es el Dr. Farel, que siempre está tan ocupado. Es difícil verte, nunca se te puede sacar una cita. ¿Qué milagro te trae por aquí hoy? —bromeó alguien sin poder contenerse.

Farel levantó ligeramente el párpado y le preguntó con sorna —¿Acaso no soy bienvenido? —

—¿Cómo no te vamos a recibir? Si te tratamos mal, la próxima vez que nos duela la cabeza o tengamos fiebre y te pidamos ayuda, capaz que nos des veneno. —

—Darte veneno sería bondadoso de parte de Dr. Farel. Peor sería que te haga sentir que es mejor estar muerto sin poder morirte. —

Los demás seguían con sus bromas y comentarios.

Evrie, por su parte, se mantenía con la cabeza gacha, sin atreverse a mirar a Farel.

y su ansiedad social casi había mejorado, pero

qué, pero frente a él, siempre sentía una mezcla

pesar de haber compartido la cama con él, a pesar de haber sentido su insistencia en esos encuentros

para jugar

sugieres? —le

guapas hoy, vamos a jugar algo sano, ¿qué les parece verdad o reto? —Berto tenía segundas intenciones—. ¿Qué

momento, su mirada se fijó en un punto

—Vamos a intentarlo. —

Farel ya había caminado con zancadas hacia ella y se había sentado a su

de Farel llegó

de revuelo y desvelo parecía impregnada de ese

asoció ese aroma con la cama, los besos y los jadeos de

sentía nerviosa y tomó un

la puerta del salón se abrió y una fila de bellas damas entró, sentándose junto a los hombres y avivando el

sofá, entre Leandro a la izquierda y Farel a la

hombres la tenían bien

estamos todos,

el momento

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255