Mientras ella desaparecía en la distancia, Farel se giró hacia Joan y le ordenó: —Encuentra a dos personas para que la sigan en secreto. No se deben exponer ni permitir que le pase nada. —

Joan asintió vigorosamente: —Entendido, Sr. Haro.—

—Además, se está quedando sin sus medicinas. Haz que alguien le lleve más en nombre de la Sra. Pardo. —

—... Entendido. —

Al salir del restaurante, Joan hizo las llamadas necesarias y, sentado en su automóvil, le echó un vistazo tras otro a Farel a través del espejo retrovisor.

No pudo resistirse y le preguntó: —Sr. Haro, ise siente mejor después de que la Srta. Evrie dijo que ya no le guarda rencor?—

Desde la noche anterior, Farel había estado de mal humor y Joan lo había sentido a su lado. Esa manana, las ojeras de Farel eran profundas y marcadas. Probablemente había pasado toda la noche sin dormir.

Farel lo miró fríamente y le replicó: —iDesde cuándo te has vuelto tan chismoso? —

Joan sonrió incómodo: —Disculpe senor, ya no le pregunto más, me callaré. —

El Range Rover arrancó y se deslizó lentamente fuera del aparcamiento.

Farel miró por la ventana. No muy lejos estaba la oficina del proyecto médico, cerca de la sede y separada solo por una avenida principal desde donde podía ver el interior.

Cerró los ojos, con la mente llena de las palabras recientes de Evrie.

No le guardaba rencor.

Lo dijo tan serenamente, tan tranquilamente.

iLo había olvidado completamente, hasta el punto de no tener ni siquiera resentimiento por él?

Al pensar en esto, el Corazón de Farel se sentía aún más pesado.

—Devuelve a esos dos hombres de Marín, deja que sepa lo que significa responder golpe por golpe. —

no había

en que Marín intentó sondear a Evrie,

a la oficina del

Marín a un evento y había dejado a Rosana sola,

ya

una recién graduada, Rosana era vivaz y astuta, con una alta eficiencia en

ser algo obsesionada

su novio, lo que a menudo

de terminar su trabajo, Evrie se despidió del encargado y se preparó

pudieran salir, Berto apareció con un imponente Golden Retriever,

lo saludó: — Berto, ihas venido

alrededor:

Estaba buscando a Blanca.

agitó los documentos en su mano y le dijo sinceramente: —Ella estaba muy ocupada y

venido, la

rio con sarcasmo: — iSe fue a construir rascacielos con Ion, verdad?

mentirle, asi que le dijo la verdad: —El edificio de Ion es

lo que la elección

aquí y

captar el subtexto de sus palabras y

raramente lo veía tan abatido, era tan diferente del seductor y elegante caballero de

que Blanca describía, y más bien parecía un

relación con Blanca parecían

dispuso a irse: —Berto, continúa con tu ỉnspección.

preguntó—: iPuedo usar tu teléfono para

Evrie...—

estaba, y

la pantalla

Berto marcó una larga secuencia de números y

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255