Caminaba a paso lento, pero con voz llena de irritación: —¡Que alguien venga y remolque mi carro! —

Esa voz arrogante era demasiado familiar.

Evrie giró la cabeza instintivamente hacia la entrada, justo a tiempo para encontrarse cara a cara con Valerio.

—¿Valerio? ¿Qué haces tú aquí? —

Valerio todavía estaba furioso, señalando con su dedo hacia su auto afuera, mientras despotricaba.

—Maldición, no sé qué loco me chocó el carro, y encima me dejó una nota diciendo que aquí lo arreglarían gratis. Mejor que no lo encuentre, porque le voy a romper las piernas. —

Evrie siguió la mirada de Valerio y vio a su Hummer con una gran abolladura en la parte trasera derecha.

Se veía en muy mal estado.

Ese era el vehículo que Valerio más apreciaba.

¿Quién podría ser tan malvado?

Joan, que había observado todo desde lejos, discretamente le dio un pulgar arriba a su jefe Sr. Haro.

¡Bien hecho!

La mirada de Valerio cayó sobre Evrie, y luego observó a Jacinto que estaba a su lado. Sus ojos se tornaron inmediatamente cautelosos.

—¿Qué hacen ustedes dos aquí? ¿Acaso se citaron a escondidas de mí? —

Valerio tenía una forma muy peculiar de pensar.

Evrie, apenada, le explicó: —¡No es una cita! Vine a comprar un auto y el Sr. Serra amablemente me está ayudando a mirarlo. —

Valerio frunció el ceño una vez más, esta vez con más descontento.

¿Acaso no soy un profesional en esto? ¿Qué porquería de auto

criticaría cualquier carro que no fuera de

sus ojos, cualquier otro vehículo aparte de los

no había llamado a Valerio para comprar el

vehículo para modificarlo.copy right hot novel

recién llegado y le dijo con timidez: —Solo lo necesito para manejar de vez

ceño, estaba claramente

inservible, todos tienen configuraciones increíbles, y cuando te ofrezco

es

un auto que había comprado que le

bonito y elegante, y a ella realmente le

en el garaje de Valerio, esos eran demasiado caros, y ella no podría pagar si los

importa, tengo

manos, la urgencia

ninguna modificación, está perfecto así como está, me voy a ir manejando.

su nuevo coche terminaría siendo remolcado junto con el Hummer de

llegó en el momento justo,

con éxito

mirada se clavó en Jacinto, con un rechazo

haces aquí otra vez, no oíste lo que te dije?

también soy hombre, sé lo que estás pensando.

de mecha corta, Evrie ya estaba acostumbrada. Tiró

chiquillo, no

fuerza, Evrie se disculpó con Jacinto, se sentía

cosas se salieron un poco

decepción cruzó los ojos de

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255