Resistiendo al amor de Mi Ex-Marido

Capitulo 131

Al percibir la frialdad en los ojos oscuros de Pedro, Manuel sabía que se había pasado hablando así, entonces encogió un poco el cuello y se rio juguetonamente: -Pedro, quiero decir que lo has hecho con buenas intenciones, pero en forma incorrecta. Ponte en su lugar, si la cuñada va al hospital a ver a un hombre a medianoche y luego te trae un regalo destinado a otra persona, ¿estás contento?

Escuchando sus palabras, respondió con impaciencia frunciendo el ceño: -Ella siempre me pedía regalos antes, pues yo pensaba que si se los entregué me molestaria menos.

-Pero no puede ser tan perfunetorio, -dijo Manuel con ansiedad-, si la cuñada te da un regalo que quiere regalar a otro hombre, ¿no estás enojado?

-Si no sabes cómo hablar, cállate, le reprendió Pedro impacientemente, ¿qué hombre? ¿ Cómo puede tener otro hombre?

Accidentalmente, Manuel dijo lo que pensaba francamente otra vez, asi que le dio una bofetada a sí mismo y continuó: -Sólo estoy haciendo una analogia, Pedro, mirate, incluso esta analogía te incomoda, ¿crees que la cuñada puede sentirse cómoda?

ha desmayado, ¿puedo quedarme de brazos cruzados?-Pedro habló con furor-, si ella normalmente

También se hizo eco como una pelota: -Pedro, la cuñada de hecho no sabe distinguir lo justo de lo erróneo, si quieres estar

lo justo de lo erróneo. Al decirlo, Pedro

palabras y casi se echó a llorar, porque no entendió qué había hecho mal exactamente ni por qué cada vez entregaba su propuesta justo cuando Pedro

puedo presentarte. Aparte de eso, Manuel lo amenazó con la cara de pena-, si no, me seguiré a ti las 24 horas del dia, te impediré cenar

una mirada y le mandó: —Ven a

-Está bien.–Manuel accedió.

de Clara, quien le dijo que iria a la empresa Caza. Cuando llegó, vio que no sólo estaban Cara y algunos ejecutivos, sino también Carlos. Comparado con la gente de la empresa Caza, Carlos pareció más indiferente y tranquilo. Sin embargo, si

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