Capitulo3o04 ) En ese momento, ella lo invité repentinamente a cenar, y Pedro sintié que aquella sensacion desagradable en su interior se intensificaba ain mas.

—Si tienes algo que decir, dilo directamente, no hace falta ir a ningtin restaurante. —dijo Pedro mientras tomaba asiento en el sofa.

Bella no se sorprendio al escuchar sus palabras, e incluso esboz6 una sonrisa.

—Estd bien.

Respondio, y se dirigio a la habitacion.

Pronto, salio sosteniendo dos documentos en sus manos.

Pedro sabia perfectamente de qué se

A 4 al SI trataba. Frunci6 el cefio: —Bella, ¢acaso no me expliqué bien aquella noche o crees que te he descuidado estos dias y quieres que pase algo entre nosotros? Ciertamente, era vergonzoso que un presidente de empresa como él utilizara ese tipo de lenguaje tan infantil.

lo critic mentalmente y colocé los documentos frente

vine a discutir contigo ni a enojarme. Antes, cuando estuviste enfermo y tenias mucho trabajo acumulado, no tuve oportunidad de hablar bien este asunto contigo.

—Aquel dia dijiste que, una vez terminado el proyecto en el

nuestras familias. Yo estuve de acuerdo

que no te gusta usar esa excusa para postergar las cosas, pero para evitar que surjan mas proyectos importantes en el futuro, creo que es mejor que firmemos el acuerdo primero. Asi, sin importar

— pregunto Pedro, con una

¢Y ahora lo consideraba

a Villa Dragén ni fingiré ser tu amorosa

todo, solo nos falta una firma, no hay necesidad de mayores complicaciones, ¢no crees? Pedro jugueteaba despreocupadamente con su teléfono movil, mirandola con 0jos inexpresivos. —¢Y si me niego? Bella contuvo la creciente irritacion y pregunté con un tono intencionadamente confuso: —;Qué problema hay? ;Por qué no estarias de acuerdo? Pedro respondi6 con calma: — Mientras no hayamos hecho los tramites,

acepto que

tomo una respiracion

de la abuela tramitariamos los papeles. Me dejaste plantaday, aunque haya sido por una buena razon, no puedes seguir asi,

venir a cuidarte cuando estuviste enfermo. Estos dias me he esforzado mucho, ¢no es asi? Por qué no puedes simplemente darme esa tranquilidad? Pedro seguia jugueteando con su teléfono. —Si quieres

volvere a mudarme alla. Lo aguantaré como sea, total, jdespués de dos anos separados nos declararan divorciados! Los dedos de Pedro se cerraron con fuerza en torno a su teléfono, sin decir una palabra. Simplemente la mir6 con indiferencia y se levanto para salir

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