Capítulo 105

Melody retrocedió dos pasos presionada por las palabras de Briar, su rostro se tornó pálido como la

muerte.

-Briar, ¡yo nunca podré ser tan despiadada como tú!-

En ese momento, el celular de Melody comenzó a vibrar en su bolsillo. Con manos temblorosas lo sacó, y al ver la llamada entrante, sintió un presagio oscuro hundirse en su corazón.

-¿Por qué tengo este mal presentimiento…?-

Al contestar, la voz de un desconocido llegó a sus oidos. -¿Eres la hermana de Igor Torres, cierto? ¡Tu hermano acaba de tener un accidente en el viaducto! Lo estamos llevando al Hospital Central de la ciudad, ¡apúrate y ven! ¡Si te demoras, quizás ni puedas verlo!-

La mano de Melody perdió toda su fuerza, el celular se le escurrió y cayó al suelo, la pantalla se hizo

añicos.

Como su corazón.

Era como si un trueno hubiese estallado junto a su oído, dejándola sin sentidos.

su hermano habla tenido un

que no pudo llevar a Eric a casa, Igor debió haber intuido que se apresuró a irla

le daria problemas, asi

Briar sintió un dolor punzante en su corazón y

-¡Al Hospital Central!-

que su cuerpo no podia sostenerse. Al ser jalada por Briar, cayó al suelo, las piernas le

sin pensarlo, la levantó en brazos; arrancó el coche y se dirigió al

más tarde, lo que le esperaba era un frío y largo corredor de quirófano, como un agujero negro despiadado. Melody sintió que su visión se nublaba con las

resonaban en sus oídos. Empujó la puerta y vio a

Sus

arrodilló junto a la cama.

el alma, con los ojos abiertos pero insensibles. Melody se vio n la corriente del tiempo, los recuerdos de Igor pasaban por su mente, pero de repente todo tizó, arrastrándola de vuelta al sombrio pasillo, para terminar en el rostro de Igor, que ya n straba

по

siempre pensó que el colapso de una persona sería teatral y extravagante, con locura y desesperación. Pero nunca imaginó que también podria ser tan silencioso como ese momento, como si el mundo de alguien se hubiera pausado en un instante, con el tiempo rugiendo a su alrededor y solo

de Igor, con una inexpresividad impactante. Briar intentó ayudarla, pero cuando ella levantó la vista, el odio en sus ojos finalmente se tiñó de sangre, agudo y penetrante. Su voz era ronca, su postura débil, pero Briar sintió

Capitulo 105

dijo, ¿Estás contento ahora?-

hecho, comenzó a reír a carcajadas una risa absurda, con

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