Rómpeme Cúrame y Olvídame

Capítulo 133

Brar parecia decidido al arrastrar a Melody hacia un rincón del reservado, mientras Leonora gritaba su nombre y se levantaba de golpe. Briar le respondió con una mirada fría como el hielo.

Brian no soltó a Melody, y todos los demás en la mes también se pusieron de pie, pensando que iba a haber pelea y buscaron alejarse.

GAUS

Leonora, con los ojos inyectados en sangre, le señaló Briar, Suelta a Melody ahora mismo!-

Briar solto una risa fria, -¿Y tú con qué derecho me das órdenes?-

Eso hizo que Leonora se riera con sarcasmo, -¿Y tú con qué derecho te la llevas? ¡Briar, si fuiste tú quien la dejaste it, y ahora vienes arrastrándote detrás de ella!-

La lengua afilada de Leonora hizo que Briar, furioso, se riera a carcajadas. Melody intentó liberar su mano, pero el hombre no cedió y la arrastró hacia la salida, con todos girando para mirar. Pero al reconocer el rostro expresivo de Briar, rápidamente volvieron a sus asuntos. Melody, incapaz de resistirse a la fuerza bruta de Briar, se sonrojó y dijo, Todos nos están mirando! ¡Sueltame!-

un pasillo de servicio y

ambiguo, mientras Melody se reía

se estremeció y bajó la vista hacia la mujer en sus

que nadie viera a Melody borracha,

tener esòs pensamientos

al cuello, con lágrimas de frustración en los ojos, y con una sola palabra para Briar,

Cuando su dignidad fue ignorada una y otra vez, agarró con fuerza el cuello de la camisa de

cabeza con todas sus fuerzas y su voz delgada resonó como una defensa final, -¡Suéltame! Me das asco!-

fuera de control, le dio

me

le dolía el oído. Cuando se recuperó, se cubrió la cara y tembló de pies a cabeza. esesperó, intentando sostener sus hombros, pero las palabras de disculpa no podían salir de Tenía miedo, el miedo de ver en los ojos de Melody una mirada que cortaba su corazón.

atrapó por la cintura desde atrás. Ella luchó para liberarse y, cuando el dolor de la bofetada llegó a su corazón, ya estaba adormecido por el frío. La mirada que le lanzó a Briar heló al hombre por completo. La pelea entre ellos parecía un combate a muerte: ella huyendo, él persiguiendo. Hasta que alguien abrió la puerta