Capitulo 86

Tania estaba confundida,

“Si te desmayaste saliendo del trabajo, lo lógico hubiera sido que quien te rescatara te llevara al hospital, no que te dejara bolada en las montañas.

Pero pensar que te encontraste con alguien malintencionado tampoco cuadra, porque no te hicieron daño a ti ni a tus hijos, simplemente te dejaron alli, en las montañas

Parece como si quisieran dejarte a tu suerte, pero tampoco es eso

exactamente

Si alguien quisiera hacerte daño, no tendria sentido dejarte dar a luz y luego, después de sacar a los bebés, hacerte una cirugia para suturarte”

Hoy, mientras daban una vuelta, Carol mencionó sin querer el asunto de las montañas cuando hablaban del nacimiento de su hijo.

Sin embargo, no habló del salvador misterioso ni de vivir en la selva de las montañas, sino de un pueblito al pie de la montaña

Carol también estaba perpleja, esa pregunta la habia estado atormentando

La persona que la llevó a la selva no parecia querer hacerle daño, pero tampoco parecia que realmente estuviera tratando de ayudarla, era simplemente extraño

“¿Esa persona no dejo ninguna pista?”

Carol negó con la cabeza, “Nada”

“¿Y después no apareció?”

“Tampoco.”

“Qué raro

Tania penso un momento y luego dijo. Pero que más da, si no se puede entender, mejor no pensar en ello Al final, la verdad siempre saldrá a la luz “

Carol asintió, ella pensaba igual

veces pasa eso, le das mil vueltas en la cabeza y no entiendes

pensar, de repente todo se aclara

de hablar de mi y de los niños, cuéntame de ti y de Samira en

persona

intelectual como ella se ha metido

convertido casi en casamentera, todos

madre mia, me da miedo hasta verlas. Cada vez que aparecen juntas,

el mundo

no pudo

me imaginaba a Beatriz asi, apurándote para que te

con alguien como yo, una mujer tan común en todo sentido? ¿Se han

misma sin piedad y luego comenzó a hablar

hasta lloraba de la rabia, siempre preguntándose cómo dos cerebritos como ellos

a pensar hasta que no era

tanto a ellos, seguro que

diciendo que dos genios habían tenido una burra, que eso era

mucho trabajo, apuesto a que habrían tenido

de que empecé a trabajar, dejó de quejarse, pero ¿quién iba a decirlo? Ahora empezó con lo de casarme, desperdiciando toda su educación para convertirse

entre risas,

graduada, es hora de pensar

quiero, estoy muy a gusto sola, ¿para qué

como Enrique, que es atento y fiel. Pero si tienes mala suerte, te toca un

vida como está, tengo mi trabajo, mi vida social, mis circulos

si no quiero moverme, me quedo en cama todo el

mil quinientos al mes, me alcanza para vivir

ni para papitas me alcanza. ¡Solo de pensarlo me da

decía Tania no

vida mejora. Pero si te toca un

puedes saber si un hombre es un patán o no, al menos

Jiato.

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