Capítulo 96

Yo…

‘Piénsalo como un préstamo, cuando tengas plata me pagas. Además, cancela el hospedaje y vente a vivir conmigo. Tengo un apartamento con tres cuartos y dos están vacíos.

Si te mudas, podré ver a mis chiquillos todos los dias y ya no estaré tan sola. Mataríamos dos pájaros de un

tiro.”

Carol se llenó de emoción.

Asintió con la cabeza, sin decir mucho, porque toda su gratitud hacia Tanla estaba en su corazón.

“Mami, madrina, vengan a jugar con nosotros!” Ledo las llamó.

Las dos sonrieron al pequeñin y caminaron juntas hacia la sala de juegos.

El ánimo de Carol mejoró bastante gracias a la ayuda de su gran amiga.

Lo que más le importaba era la escuela de sus hijos, y ahora que Tania le había dado una idea para resolverlo, sentía que se habia quitado un peso de encima.

“¡Ay!”

De repente, Luca soltó un grito.

empujado de la motito de juguete y cayó de sentón al

ya estaba montado en la motito que había

haciendo vroom vroom con la boca, se veia que

de culpa por haberle quitado la motito a Luca y por

pólvora, no lo iba a dejar asi nomas. Avanzó y lo empujó con fuerza, tirándolo de la motito y

volcaron las tortillas! ¿Quién te dio permiso para tocar a mi

en el acto,

corrió hacia él y lo alzó

amor, ¿dónde te golpeaste? ¿Dónde

pompis duele, buaaa…”

preocupada y señaló a Ledo para

a pegarle a

alta y más feroz que ella,

y toda tu familial”

insultarme, tú, tú, tú…! ¡Voy a darte

a pegarle a Ledo y alzó la mano,

detrás de ella, le echó

que estás

empujó a mi hijo? Supongo que eres la madre de este niño, ¿cómo lo educas? ¡No tiene ni un poquito de modales! Esto es un lugar de juegos, todo es para compartir, ¿por qué él

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que echabs chiapas,

jugando tranquilo cuando tu

puso toja

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