Capítulo 644

Ella apretó los labios y levantó la cara, queriendo preguntarle con qué derecho, pero al encontrarse con sus ojos Intensos, se echo para atrás.

Realmente le tenía miedo a sus besos!

Carol, con el rostro fruncido, cambió de tema, “¿Cómo supiste que Rick almorzó con nosotros?”

Aspen abrió la galería y le mostró una foto.

Rick había publicado una historia hace una hora, con tres fotos y un texto.

Las fotos eran de su brazo enyesado, los platos que habian comido al mediodía, y una de unas flores abiertas.

El texto decía: “La vida tiene sus altibajos, hay que tomarlo todo con calma y vivir cada día con una actitud positiva y optimista, si tu corazón está en el lugar correcto, las flores florecerán por sí mismas.”

Carol no entendía, “Pero no mencionada sobre almorzar juntos.”

Aspen le pellizcó la mejilla,

“¡Tonta! En cuanto vi los platos supe que los habías hecho tú, y además, había cuatro juegos de cubiertos de niños sobre la mesa.*

Carol tuvo una revelación,

“Por eso… ¡pensé que los niños te lo habían dicho!”

Al mencionar a esos cuatro pequeños traidores, Aspen se sintió frustrado, era un asunto grande y ninguno le había dicho nada, ni siquiera Miro, que le avisó hasta después de comer.

¿Acaso si hubieran llorado y armado un escándalo, habrían evitado que Rick se saliera con la suya?

aún son niños, hacer un escándalo no tiene nada

fuera vergonzoso, no podrían sacrificarse un poco por

los quería

de pensar en los pequeños

piensas de la

devolvió la pregunta, “¿Qué tiene esa

frunció los labios, claramente ella no había notado

esa historia a propósito, era una provocación y también una forma de

definitivamente sabía que él estaba pendiente, y que

pesar de las advertencias, seguía acercándose a Carol y los niños, eso era

que Rick había almorzado con Carol, podría terminar en una pelea

tenía razón,

algo raro?”

legua que es un hombre

Carol: “…”

su cara, ¡no es ninguna calumnia!”

le pasó el

importa lo que digas de Rick, no tiene nada que ver conmigo, pero no fue idea mía invitarlo a almorzar, y es injusto que me culpes sin saber cómo fueron las

con

fue Tania quien lo invitó antes de que

“Entonces, ¿por qué…?”

“Solo quería besarte.”

N

silencio se apoderó del auto de repente.

miró con los ojos bien abiertos/ sorprendida.

se quedó paralizado, había hablado más rápido de lo que

uno con una

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