¡Sorpresa! Tuve Cuatrillizos con Mi Desconocido Esposo

Capítulo 704

El hombre jadeaba aterrorizado, vestido únicamente con unos ligeros calzoncillos, y a pesar del frío de la temporada, estaba empapado en sudor.

Algunas gotas de sudor se deslizaban hacia sus ojos, causándole un dolor punzante. Con los párpados temblando, se sentía incómodo y asustado.

Aspen levantó la mano y arrancó la cinta que cubría la boca del hombre.

Inmediatamente, el hombre suplicó por su vida, “¡No me mates! ¡Te lo ruego, no me mates! Te diré todo lo que sé, no, no, mejor mátame de una vez, pero no me tortures, yo… jah…!”

El grito del hombre salió disparado de la casa de metal, ¡casi levantando el techo!

Gael y Abel estaban de pie en la puerta, charlando despreocupadamente, como si no escucharan nada.

Abel pregunto: “¿Cuánto hace que Aspen no venía por aquí?”

Gael tardó un momento en responder, “Dos años.”

Abel suspiró, “La Srta. Carol se desmayó del susto, Aspen está destrozado.”

Gael, con las manos en los bolsillos, se apoyó en el marco de la puerta observando el vasto y oscuro mar, escuchando tranquilamente el viento y los gritos desesperados provenientes del interior, sin decir una palabra.

Todos tienen un límite, y hay líneas que no se deben cruzar, especialmente las de Aspen.

tienen la mala suerte de vivir

se escucharon sollozos ahogados desde la

absoluto.

de metal se abrió y Aspen salió, sus manos cubiertas de sangre.

dirigió hacia el mar y se arrodilló

ofreció una toalla limpia para que se

aún estaba atado en la cama, consciente,

༢ འཁོ ན

no parecía importarle demasiado. Retiró la mirada y volvió

que Abel le pasaba y se secó. Luego encendió un cigarrillo, dando unas caladas antes de

traidor entre

y las expresiones de

preguntó rápidamente,

ceniza del cigarrillo,

responsable de las personas cercanas a

alguna

que hay un traidor.

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no llevaba guardeespaldas cuando llevé a Carol al supermercado. Fue

por guardaespaldas vestidos de civil, pero hoy, sintiéndose de buen humor,